Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina firmarán el próximo mes de junio su divorcio, momento en el que Irene Urdangarin, su hija pequeña será mayor de edad. La hija de Juan Carlos I quiere agradecerle su silencio en relación al caso Nóos y haberse implicado totalmente. Por este motivo, el acuerdo es totalmente satisfactorio para el ex duque de Palma. La madre de Pablo, Miguel, Juan e Irene le pagará una pensión mensual con la que podrá vivir tranquilo para siempre, le abonará una pensión de dos millones de euros, dinero que le hubiesen pagado si aceptaba escribir un libro sobre la infanta, y pondrá a su nombre varias propiedades de la costa francesa. Además, por petición de Iñaki se le mantendrá la escolta, privilegio que perderá cuando firme el divorcio. Cristina también se hará cargo de los viajes siempre que estén relacionados con visitas a sus hijos.
Con este acuerdo la infanta Cristina se ha sentido aún más humillada. Y es que en el último año su marido le ha sido infiel y todavía tiene que solucionarle la vida. Pero ella no se piensa quedar callada, entre todas las páginas también hay una cláusula escrita por ella y que afecta directamente a Ainhoa Armentia.
La infanta Cristina quiere a Ainhoa Armentia fuera de la vida de sus hijos
Mientras Iñaki Urdangarin ha rehecho su vida con Ainhoa Armentia, la infanta Cristina se encuentra cada vez más sola. Está necesitando ayuda psicológica para afrontar este duro proceso. La hija de Juan Carlos tiene la mirada en el futuro. Tras el verano, Irene, que es un alumna excelente, empezará la universidad y ya ha hecho saber a su madre que quiere irse con sus hermanos a Barcelona. La hermana de Felipe debe decidir si quedarse en Ginebra o teletrabajar desde España. En Suiza ha conseguido prácticamente el anonimato que deseaba y en España volverá a ponerse en el foco mediático. No quiere ninguna pregunta sobre su ex y su relación con Ainhoa Armentia.
Ainhoa Armentia e Iñaki Urdangarin serán totalmente libres en unos meses. Ella ya ha firmado el divorcio con el padre de sus hijos. Incluso se habla de una futura boda para formalizar la relación, pero de momento quieren convivir juntos. Los hijos de la abogada son menores y evita que pasen tiempo con el ex duque, están en una edad rebelde. Los hijos de Iñaki tampoco conocen a Ainhoa, pero en esta ocasión por la infanta Cristina.
En el acuerdo de divorcio existe una cláusula en la que no solo se le pide silencio a cambio de todos los privilegios, sino también evitará que sus cuatro hijos conozcan a Ainhoa Armentia. Siempre que esté con Juan, Pablo, Miguel o Irene debe acudir sin ella. Los dos más jóvenes no la pueden ni ver.