El encuentro marinero del rey Felipe y su tripulación del Aifos con una misteriosa chica rubia en un reducido bikini blanco en el puerto de Palma creó cierta confusión. Todo se ha aclarado cuando hemos sabido que la mencionada joven, que según se podía apreciar en las fotografías de los paparazzis tapaba con cierto rubor su cuerpo con una toalla, era su ahijada: Martina Jaúdenes. Hija de un amigo piloto y armador de embarcaciones, Eugenio, no sólo llamó la atención del Borbón y sus grumetes, sino que también la de la opinión pública. Su nombre ha empezado a ser uno de los más buscados en redes sociales. Tampoco ha sido una operación complicada, ya que su Instagram es público y ofrece un retrato ajustado de la vida de Martina, que sigue la estela de 'bon vivants' del padrino.
La joven empresaria y propietaria de una compañía de cosméticos naturales está casada con Luis Abascal, dueño de un grupo de restauración que se llama 'La,La,La'. El enlace tuvo lugar en la catedral de la capital balear en 2017, y las crónicas hablan de que el propio Felipe asistió a la fiesta posterior. Es muy activa en redes sociales, donde combina su actividad profesional con la exhibición de lo que parece su gran pasión: El mar, en todas sus variantes: Dentro, fuera, cerca, lejos, en bikini o más tapadita, brindando, riendo, posando, etcétera.
Martina nunca olvidará el encuentro con su famoso padrino en el puerto de Palma para verle participar en la Copa del Rey de vela. Quizás que en vez de tapar su ajustado traje de baño, hubiera preferido que la toalla la cubriera entera, de cabo a rabo.
Se hubiera ahorrado una avalancha de miradas curiosas y (algunas capciosas, seguro).