La realeza danesa vive una etapa de cambios constantes, empezando por los propios depositarios de la corona. La era de Federico X y María de Dinamarca arrancaba el pasado 14 de enero en medio de unas turbulencias bestiales, que amenazaban con catástrofe total si no fuera por la inmolación de la reina Margarita II, sacrificada por los cuernos de su hijo a su esposa. Los primeros meses al frente de la corona han sido narcotizantes, un festival de vagos descarado. Todo ha estallado esta pasada semana, con la primera visita de estado del matrimonio. La vecina, amiga y familia Suecia les recibía con honores. Y la pareja se tenía que arremangar para cumplir con el papel, o papelón, que les correspondía.
El viaje sueco ha estado lleno de simbolismo, empezando por la curiosa forma de llegar a Estocolmo de los daneses: lo hacían a bordo del Dannebrog, el barco real. Una embarcación en la que había un personaje VIP que Mary ocultaba fuertemente, era su gran secreto. Se trata de Kasper Astrup. Su nombre no sonará absolutamente de nada, si es que no viven en Dinamarca y son seguidores de los reality shows y de las celebridades locales. Este tipo tan trendy:
Some minutes ago the royal luggage was carried off the ship.
— ChristinZ (@ChristinsQueens) May 7, 2024
Queen Mary´s new hairdresser also left the ship, Kasper Astrup.
The media expects the Royal Couple and their team will fly back to Copenhagen tonight.
📸Kaspar Wenstrup // Billed Bladet pic.twitter.com/4kRaFCa4B3
Cuando Federico y Mary abandonaban la nave y eran recibidos por sus homólogos suecos, por la pasarela del Dannebrog caminaba discretamente el tal Kasper, cargando su propio equipaje. Dos bolsas, en concreto: en una, vestuario y objetos personales. En la otra, equipamiento profesional. Porque el hombre es peluquero, estilista, diseñador capilar. Y el escogido personalmente por la nueva reina para convertirse en su profesional de cabecera. Después de 23 años de confianza en otras manos, las de Søren Hedegaard Boye, y coincidiendo paradójicamente con la renuncia a la corona de la anciana Margarita, los Glücksburg estaban sin peluqueros. Es una información del 'Billed-Bladet'.
Kasper, de enorme actividad en redes sociales exhibiendo muestras de sus creaciones, también ha mantenido en secreto este contrato en exclusiva para peinar a la monarca consorte. Un secreto que ahora ha quedado totalmente al descubierto, hecho que presumiblemente encarecerá más su valor en el mercado danés e internacional. Mary, como todas las reinas y reyes, ya tiene peluquero. Llongueras y el 'brushing' para Sofía, Iranzo el de las pelucas para Juan Carlos, María Luz Valero Reneses (expeluquera en TVE) para Letizia... El álbum de cromos va creciendo.