La idea de ser rey o reina puede ciertamente despertar la imaginación de muchas personas, ya que implica tener poder, riqueza y un estatus elevado en la sociedad. Para algunos, este concepto es simplemente una fantasía inalcanzable, pero para aquellos que están emparentados con la realeza, como Meghan Markle, podría ser una posibilidad real en algún momento. La actual duquesa de Sussex, quien se casó con el príncipe Harry en 2018, ha expresado entre su círculo su interés en ser reina. Esta ambición no es sorprendente, considerando las oportunidades y el prestigio asociados con el cargo. Sin embargo, la realización de este deseo depende de varios factores, especialmente de la línea de sucesión al trono.
Meghan Markle no lo tiene tan fácil para ser reina
Actualmente, el príncipe Harry es sexto en la línea de sucesión al trono británico, detrás de su padre, el rey Carlos III, el príncipe Guillermo y sus hijos. Para que Meghan Markle tenga la posibilidad de convertirse en reina, la línea de sucesión tendría que despejarse en favor del príncipe Harry, lo que podría ocurrir si varios miembros de la familia real británica renuncian a sus derechos al trono o si se producen cambios en la ley de sucesión.
Sin embargo, la situación actual sugiere que el príncipe Guillermo, como primero en la línea de sucesión después de su padre, es el heredero más probable al trono. Aunque la posibilidad de que el príncipe Harry ascienda al trono no puede descartarse por completo, parece poco probable a corto plazo, especialmente dado el compromiso del príncipe Guillermo con sus deberes reales y su propia familia.
La relación entre los hermanos reales, el príncipe Harry y el príncipe Guillermo, ha sido objeto de especulación y rumores en los medios de comunicación. Si bien es difícil determinar con certeza si la ambición de Meghan Markle de convertirse en reina influyó en su matrimonio con el príncipe Harry, es posible que esta aspiración haya sido considerada en el contexto de la dinámica familiar y la sucesión al trono.
El príncipe Guillermo será el próximo rey
Es importante destacar que la monarquía británica es una institución arraigada en la tradición y el protocolo, y cualquier cambio significativo en la línea de sucesión requeriría un proceso cuidadosamente considerado y posiblemente provocaría un intenso escrutinio público y de debate. Es debido a esto que no se prevé que nadie más que el príncipe Guillermo ocupe el puesto de Carlos III una vez este de por finalizado su mandato.
Esto último no parece que vaya a suceder tan lejos en la línea de tiempo, pues su enfermedad y la presión de sus responsabilidades podría hacer que abandone pronto su papel como rey de Reino Unido. Si Carlos III deja de lado la corona, el mayor beneficiado sería el príncipe Guillermo, y no habrán cambios en la línea de sucesión, por lo que los deseos que tiene Meghan Markle en estos momentos se quedarán como eso: deseos y fantasía.