El príncipe Harry y Meghan Markle se han encontrado sin un hogar fijo en Inglaterra desde que fueron desalojados de Frogmore Cottage el verano pasado. Pese a los rumores de que Harry desea un regreso más permanente al Reino Unido, sus esfuerzos se han visto frustrados. Una fuente cercana a Meghan ha revelado a ‘Vanity Fair’ que la duquesa de Sussex ha frenado en seco cualquier plan de mudanza al Reino Unido, enfocándose en cambio en encontrar una nueva residencia en Malibú, el codiciado refugio de las estrellas de Hollywood.
El escritor especializado en realeza, Tom Quinn, alimentó las especulaciones en una entrevista con el ‘Daily Mirror’, donde sugirió que Harry podría estar cansado del estilo de vida californiano. "Echa de menos a sus viejos amigos de Eton y del ejército, muchos de los cuales no le han visitado porque no se llevan bien con Meghan", afirmó Quinn. "Harry está decidido a encontrar su propio hogar permanente en el Reino Unido, por eso continúa su acción legal para conseguir que el contribuyente británico pague por su seguridad", agregó.
Meghan Markle se planta: ¡Ni hablar de volver a Inglaterra!
No obstante, estos rumores han sido desmentidos recientemente. Parece que Meghan Markle no está dispuesta a volver a pisar suelo británico y ha amenazado con el divorcio si Harry decide regresar a su tierra natal. Según Omid Scobie, autor cercano a la pareja, Meghan nunca se sintió verdaderamente cómoda en el Reino Unido. Scobie, conocido por sus libros "Finding Freedom" y "Endgame", ha revelado que la ex actriz estadounidense “no quiere volver a poner un pie jamás en Inglaterra”.
El verano pasado, Harry y Meghan sacaron sus pertenencias de Frogmore Cottage, la casa de cinco dormitorios cerca del castillo de Windsor a la que se mudaron poco después de su boda en 2018. Si bien en 2020 se habían mudado a California, estableciendo allí su residencia principal, mantuvieron esta propiedad dentro de los terrenos de Windsor con la intención de utilizarla durante sus eventuales visitas al Reino Unido. No obstante, tras la coronación del rey Carlos III, este exigió que la pareja desalojara por completo la propiedad, viéndose obligados a retirar todas sus pertenencias de lo que fuera su morada temporal en suelo británico.
El dilema del príncipe Harry con la decisión de Meghan Markle
En 2024, Harry ya ha realizado algunos viajes a su país natal, incluyendo una visita de un día en la que se reunió con el rey Carlos III poco después de que este anunciara su diagnóstico de cáncer. Sin embargo, en su más reciente visita para conmemorar el décimo aniversario de los Juegos Invictus, se alojó en un hotel en lugar de en un apartamento de palacio, destacando la creciente tensión en la familia real.
Con Meghan firme en su decisión de no volver a Inglaterra, el príncipe Harry enfrenta un dilema de proporciones reales. ¿Se rendirá a los deseos de su esposa o luchará por recuperar una parte de su vida que ha dejado atrás? El drama en la familia real británica continúa, y solo el tiempo dirá si Harry encontrará una manera de conciliar sus raíces británicas con su vida californiana. Por ahora, Meghan parece tener la última palabra, y esa palabra es "California".