Desde el anuncio de su renuncia a los deberes reales en 2020, el príncipe Harry y Meghan Markle han sido objeto de constante escrutinio y controversia. Su salida del Reino Unido hacia los soleados confines de California no solo causó revuelo en la Casa Real británica, sino que también desencadenó una reacción mixta en el público británico. Sin embargo, mientras intentan establecerse en su nueva vida, la pareja se encuentra enfrentando un desafío aún mayor: restaurar su imagen en la tierra natal del príncipe Harry.

No olvidemos que hace poco más de un año, el lanzamiento de las memorias de Harry, bajo el título 'Spare', conquistó las listas de éxitos a nivel mundial. Sin embargo, las críticas contundentes hacia su familia desencadenaron una disminución de su popularidad tanto en América como en Europa. Además, su documental de Netflix recibió una lluvia de críticas negativas, Spotify canceló su contrato con ellos, y se convirtieron en blanco de burlas ante una audiencia masiva en programas como South Park y Family Guy.

Desesperada por la redención: Meghan busca ayuda

Ahora bien, en un intento por mejorar su reputación y la de su fundación, Archewell, Meghan Markle ha recurrido desesperadamente a la ayuda profesional para ganarse el favor del público británico una vez más. Sin embargo, parece que su tarea está lejos de ser sencilla. A pesar de su deseo de reconciliación con el Reino Unido, muchos expertos en relaciones públicas han rechazado la idea de representar a los Sussex. Argumentan que, aunque puede ser tentador trabajar con ellos, la pareja tiene la mala reputación de no escuchar consejos.

Fracturas familiares y resentimientos: la resistencia de Kate Middleton

La situación se complica aún más con la crisis interna que enfrenta la monarquía británica, agravada por la enfermedad del rey Carlos III y el retiro temporal del príncipe Guillermo para apoyar a Kate Middleton después de una cirugía abdominal. Mientras tanto, los intentos de Meghan por acercarse a la Familia Real, especialmente a Kate Middleton, parecen encontrar resistencia. Aunque se han reportado intentos de comunicación, la tensión entre las cuñadas persiste, con fuentes cercanas sugiriendo que la princesa de Gales está renuente a perdonar y olvidar.

La desaprobación de la Familia Real británica hacia Meghan Markle es evidente, y se ha profundizado aún más por las acciones y palabras de la duquesa de Sussex. El impacto de sus memorias, su documental en Netflix y otros eventos públicos han contribuido a una imagen desfavorable tanto en el Reino Unido como en el extranjero. La falta de perdón por parte de los Windsor refleja el daño percibido que Meghan ha infligido a la Corona británica.

Sin embargo, algunos observadores sugieren que detrás de la búsqueda de redención de Meghan Markle podría estar una estrategia de marketing más amplia. Se ha especulado que la duquesa podría estar buscando revivir y monetizar su blog de estilo de vida, 'The Tig', especialmente después del éxito financiero de marcas similares, como GOOP, fundada por su amiga Gwyneth Paltrow. A medida que buscan reconciliarse con su pasado y encontrar un lugar en el corazón del pueblo británico una vez más, el camino de Meghan Markle y el príncipe Harry hacia la redención sigue siendo incierto y lleno de obstáculos. Sin embargo, solo el tiempo dirá si logran restaurar su imagen y ganarse el perdón de aquellos que alguna vez los consideraron parte de ‘The Firm’.