Una de las tantas acusaciones de Meghan Markle sobre el estricto protocolo de la Familia Real británica ha sido desmentida de forma contundente por Kate Middleton, princesa de Gales, y Sophie de Edimburgo. En un reciente evento, tanto Kate como Sophie decidieron vestir del casi el mismo tono de azul, demostrando que no existen restricciones en cuanto a los colores que pueden usar las representantes principales de ‘La Firma'. Este hecho contradice las afirmaciones de la duquesa de Sussex en su documental de Netflix, ‘Harry & Meghan’ donde afirmó que ella no podía vestir del mismo color que otras miembros de la realeza en un mismo evento.
Las acusaciones de Meghan Markle y la respuesta de Kate Middleton y Sophie de Edimburgo
En uno de los episodios de la exitosa docuserie, la esposa del príncipe Harry indicó lo siguiente: "Según tengo entendido, nunca puedes llevar el mismo color que Su Majestad si se trata de un acto de grupo, pero tampoco deberías llevar el mismo color que otros de los miembros más veteranos de la familia”. Y agregó: “Había que pensar en ello. Así que yo pensaba... 'Bueno, ¿cuál es un color que probablemente nunca van a usar? ¿Camel? ¿Beige? ¿Blanco?", dijo Meghan, quejándose de haber tenido que apagar su brillo para pasar desapercibida y no opacar a otros miembros de la realeza con la elección de su vestuario. Sin embargo, esta información fue desmentida por numerosos medios británicos, que compartieron varias imágenes de royals vestidas del mismo color que la mismísima reina Isabel II.
Los looks de la Garden Party en el Palacio de Buckingham ‘ridiculizan’ a Meghan Markle
Pero la verdadera “humillación” de la ex actriz de ‘Suits’ tuvo lugar hace pocos días, durante la Garden Party en los jardines del Palacio de Buckingham, la primera ‘fiesta de jardín’ tras la coronación de Carlos III. En este evento, Kate Middleton y Sophie de Edimburgo desafiaron las declaraciones de la duquesa de Sussex al lucir atuendos prácticamente iguales. Ambas mujeres, quienes ostentan dos de los títulos más importantes dentro de la realeza británica, demostraron que no existe tal restricción en cuanto a los colores que pueden usar.
Para este evento, la esposa del príncipe Guillermo se decantó por un traje firmado por Elie Saab, el mismo atuendo que ya había usado en 2019 durante su asistencia a las carreras de Ascot. Este outfit, compuesto por una blusa y falda midi en color azul cielo y elaborados en tul con plumeti, fue complementado con un tocado del famoso sombrerero británico Philip Treacy, un bolso de mano en color plata, también de Elie Saab, y unos salones del mismo tono de la firma Gianvito Rossy. Por su parte, Sophie de Edimburgo, esposa del príncipe Eduardo, lució un elegante vestido midi de la firma Suzannah, el cual también había usado antes de la coronación de Carlos III. Este vestido, un tono más oscuro que el de Kate, está confeccionado en guipur y cuenta con un cinturón incorporado y unos detalles de jaretas en la zona del escote. Con este acto de complicidad, Kate Middleton y Sophie de Edimburgo han demostrado que las acusaciones de Meghan Markle carecen de fundamento, poniendo nuevamente en entredicho la veracidad de sus palabras.