La historia de la familia Ortiz Rocasolano es un ejemplo de cómo la vida de una persona y su entorno puede dar un giro radical. Con la entrada de Letizia en la familia real española, las cosas cambiaron, pero no fue un proceso fácil ni exento de tensiones. Los Borbones, aunque ahora la aceptan como parte de la familia, no los recibieron de manera cálida en un principio, considerándolos inferiores debido a su origen plebeyo. Estas tensiones afectaron profundamente a Letizia, que siempre sintió la distancia que los Borbón imponían.
Paloma Rocasolano, madre de Letizia, tuvo una vida marcada por la modestia y la disciplina. Sus vacaciones en Benidorm se volvieron famosas, retratando a una mujer que, pese a las dificultades, siempre buscaba mantener un estilo de vida organizado. Con sombrilla, silla plegable y una nevera repleta de bocadillos, Paloma pasaba el día en la playa con sus hijas, cuidando cada detalle para no gastar más de lo necesario.
La vida de los Ortiz Rocasolano antes del compromiso de Letizia con Felipe VI estaba marcada por los problemas económicos
El libro de David Rocasolano destapó la verdadera situación financiera de la familia antes de que Letizia se casara con el príncipe Felipe. Aunque la boda real fue motivo de celebración, también fue vista como una oportunidad para mejorar su difícil situación económica. Tras el divorcio de Paloma, su vida cambió drásticamente. Pasó de vivir en una casa familiar a mudarse a una pequeña buhardilla de 37 metros cuadrados en el centro de Madrid. Las deudas se acumularon, y Paloma tuvo que recurrir a préstamos para subsistir, apoyándose en sus hijas en varias ocasiones.
Telma Ortiz, hermana de Letizia, también enfrentaba sus propios problemas económicos, viviendo en Barcelona con préstamos e hipotecas. Incluso Erika, otra de las hermanas, no gozaba de una buena situación financiera. La familia vivía como cualquier otra en España, ajustando cada compra a un presupuesto limitado.
Letizia lo cambió todo
Sin embargo, el giro en la vida de los Ortiz Rocasolano llegó cuando Letizia se convirtió en princesa y luego en reina. Lo que parecía un avance en la carrera profesional de Letizia se transformó en un cambio monumental para toda la familia. Su nueva posición no solo les permitió salir de las deudas, sino que también les abrió las puertas a un estilo de vida cómodo y glamuroso. Paloma, que antes vivía ajustada a un presupuesto limitado, ahora disfruta de un estatus elevado, frecuentando lugares exclusivos de Madrid.
La entrada de Letizia en la familia real ha permitido que toda la familia deje atrás las dificultades económicas. Hoy en día, ya no es necesario que trabajen, pues la reina se asegura de que no les falte nada. Paloma y Jesús Ortiz, sus padres, disfrutan de una vida mucho más cómoda, dejando atrás los años de penurias económicas.