Estos últimos años están siendo grises para los Borbón. En tan solo dos años han tenido que despedirse de Constantino de Grecia, hermano de la reina Sofía, que falleció a causa de un derrame cerebral. Por otro lado, el año pasado, con tan solo seis meses de diferencia fallecieron dos de los hijos de la infanta Pilar, hermana de Juan Carlos I. Después de un día de alegría, el cumpleaños de Juan Carlos I, la familia recibió otra triste noticia para cerrar uno de los años más tristes.
El mismo 5 de enero, día en que cumplió años Juan Carlos I, tan solo unas horas más tarde de la felicitación, recibieron una llamada que les confirmaba el fallecimiento de Fernando de Borbón y Medina, uno de los mejores amigos de la infanta Elena. Es sobrino en segundo grado del rey emérito. Falleció por un infarto a los 58 años de edad en Sevilla. Era descendiente del histórico rey Alfonso XIII. El funeral se celebró el pasado 6 de enero en la más estricta intimidad. Las infantas Elena y Cristina tenían pensado quedarse toda la semana en Abu Dabi, pero finalmente tuvieron que volver de urgencia.
El sobrino de Juan Carlos I falleció de un infarto
Es una muerte que llega a la familia de forma inesperada, sin despedidas, sin aviso, ya que el hombre no arrastraba ninguna dolencia previa. Ha sido un golpe muy fuerte para la familia Borbón después de haber perdido a los dos sobrinos de Juan Carlos I en tan solo un año.
Fernando de Borbón estaba casado con María Vallejo Miras desde 1999 y tuvo tres hijos. Sofía, Ignacio y Fernando de Borbón y Vallejo. Nació en Sevilla en 1966 y llevaba poco tiempo prejubilado. Entre los empleos más destacados se encuentra el de haber formado parte de la dirección comercial de Endesa.
Fernando de Borbón era hijo de Alfonso de Borbón y Pérez del Pulgar e Inés Medina Atienza. Su padre falleció en enero de 2007 y su madre en septiembre de 2008. Ambos tuvieron que sufrir la pérdida de uno de sus hijos hace 20 años.
Aunque en esta ocasión sus padres no han visto su fallecimiento, en 2005 tuvieron que presenciar la muerte de un hijo, Alfonso. El joven conducía por la A-1 a la altura de la localidad madrileña de El Molar. En un momento se salió de la vía de forma accidental y quedó en estado crítico. Perdió el control del vehículo y colisionó con un muro de hormigón, dando varias vueltas de campana. Alonso entró en parada, pero pudo ser reanimado. Un día después se confirmó su fallecimiento en el hospital La Paz de Madrid.
