Los royals están en plenas vacaciones. Claro está, lo tienen que entender, tienen una vida llena de obligaciones y necesitan desconectar. Los Borbones a punto de ir hacia Marivent, veremos si solos o en compañía de las hijas, si también se apuntarán las infantas y quien seguro que está será la reina emérita. A Juan Carlos, ni está ni se lo espera. Pero los monarcas españoles no son los únicos que pasarán un verano de relax y disfrutando del sol y el agua. En Dinamarca tampoco se privan de nada. Detengámonos pues con uno de los royals de aquella casa real, un joven que está pasando unos días con amigos y pareja. Un verano idílico, el de Nicolás de Dinamarca.

El príncipe, que actualmente vive en Australia, ha vuelto a Europa por unos días, donde, como él mismo dice en la publicación dónde saca la cabeza por una ventana, "Tres generaciones, el mismo lugar, años de distancia." Un lugar especial para ir de vacaciones, ni más ni menos que el mismo lugar que se compraron 50 años antes la reina Margarita y el príncipe Henrik, sus abuelos: el chateau de Cayx. El nieto mayor de la anterior monarca se encuentra ahora en este castillo de la localidad francesa de Cahors, tal como explican en Vanity Fair. Y ha ido acompañado. ¿De quién? De un grupo de amigos y de su pareja, su novia, danesa como él, Benedikte Troustrup. Juntos se han bañado en el río Lot, han ido en barco, han jugado a la petanca y han tenido una bucólica cena en los jardines del castillo. La chica de Nicolás también se marchó a Australia con él, donde viven los dos enamorados y felices de la vida, donde el conde trabaja como modelo y ella tiene una marca de accesorios para el pelo.

Benedikte es la primera pareja que se le conoce al príncipe danés. Hija del CEO de uno de los bancos más importantes en Dinamarca, el Sydbank, se conocieron en el internado Herlufsholm. Cuando se supo de esta relación, fue muy celebrada, especialmente en su país, donde Nicolás rompió la costumbre familiar de iniciar relaciones sentimentales con personas no danesas. Un Nicolás feliz de la vida con su compañera, y también a nivel profesional, ya que después de fichar por una prestigiosa agencia de modelos sueca, debutó sobre la pasarelas desfilando en la Fashion Week de Londres.

Y ahora, unas vacaciones de postal. Envidia sana.