Cada vez son más fuentes las que afirman que los reyes Felipe VI y Letizia han seguido los pasos de los eméritos Juan Carlos I y Sofía en lo que se refiere a su matrimonio. Es decir, seguir juntos en público pero hacer vidas separadas en privado. Se han convertido en un simple equipo de trabajo. Un camino que, según crecientes rumores, también han seguido Meghan Markle y el príncipe Harry.
Las apariciones en conjunto de Felipe VI y Letizia se asemejan a un espectáculo cuidadosamente orquestado, donde la verdadera dinámica familiar queda oculta tras sonrisas y gestos amables. Las comparaciones con la historia de Juan Carlos I y Sofía no son casuales, ya que ambos matrimonios parecen estar atrapados en un ciclo de apariencias.
Meghan Markle y el príncipe Harry, tras los pasos de Felipe VI y Letizia
Sin embargo, como decíamos, este patrón de matrimonios rotos no es exclusivo de la realeza española. Los duques de Sussex, Meghan Markle y el príncipe Harry, también han sido objeto de constantes especulaciones sobre su relación. Aunque al principio mostraban una imagen de pareja unida y enamorada, las apariciones en público por separado y las decisiones de ambos de emprender caminos diferentes han alimentado los rumores de que el matrimonio atraviesa una crisis.
En los últimos tiempos, se ha visto a Meghan Markle acudir a varios eventos en solitario, como ocurrió en una reciente gala en Los Ángeles, mientras su marido, el príncipe Harry, disfrutaba de una caminata con amigos o ha estado llevando a cabo compromisos en solitario en lugares como Londres y Lesoto.
La atención de los medios se ha centrado en estos momentos, donde ambos parecen estar siguiendo caminos distintos. El hecho de que Meghan optara por no acompañar a su esposo en actividades al aire libre ha alimentado aún más los rumores sobre el estado de su relación.
Harry y Meghan, cada uno por su lado
Se han difundido detalles que indican que la pareja ha estado pasando largos períodos separados, lo que ha llevado a cuestionar la solidez de su matrimonio. Aunque inicialmente negaron estos rumores, la frecuencia con la que Harry y Meghan están ahora en situaciones de distancia ha hecho que muchos se pregunten si su relación se asemeja más a un acuerdo que a una unión romántica. Además, se han reportado desacuerdos significativos en cuanto a la crianza de sus hijos, lo que añade más tensión a su situación.
Estos episodios no han hecho más que intensificar los comentarios sobre un distanciamiento en su relación, similar al que se comenta en la pareja real española. Al igual que Felipe VI y Letizia, los Sussex parecen haber tomado caminos distintos en su vida personal.