Los ocho nietos de Juan Carlos llenarán las páginas de la prensa rosa los próximos 70 años. Muertos los adultos, el futuro será la banda de los 8 borbones en tres grupos. Leonor y Sofía, intocables y únicas dentro del concepto Familia Real, los cuatro catalanes, que por ser catalanes y urdangarines viven la diáspora en 4 países diferentes y no mueven a escándalo, y los peores, los dos Marichalar. Son los mayores, Froilán y Victoria Federica. El primero acaba de ser expulsado de una discoteca tras verter un peligroso gas sobre los que bailaban en la pista. Está a punto de cumplir 24 años. no 14. El desfase de Froilán:
Su hermana pequeña no es mejor: beneficiada por las tarjetas black de su abuelo, que le paga incluso el caballo que cabalga. A Victoria Federica, Vic no se le conoce oficio pero sí beneficio: cobra de las marcas para asistir a eventos con photocall. Como Juan Carlos: va a comisión. Ahora que cuelga una foto en un desfile de moda en París al lado de la cantante Rihanna, la frivolidad de celebrity llega al punto que incluso una cara popular de Telecinco dice basta. Es la catalana Núria Marín, de Sálvame:
Escribe la presentadora sobre la foto de la royal y la cantante. Núria Marín:Núria Marín: "Me podéis matar pero a mí, que de repente Victoria Federica sea una súper celebrity e influencer pures que no me entra. No le veo nada de nada. ¿Que es de la royal family? O sea famosa por linaje. Y exactamente ¿por qué la tengo que admirar? Ala, hasta luego". Muy bien dicho. Una chica de 21 años que dedica su instagram no a causas benéficas o a ayudar a la gente sino a lucir modelitos, joyas y lugares que el 99% de la sociedad no se puede pagar. Es tan frívola, ridícula y justa que no lo entiende. Es hija de dos personajes igual de frívolos y prepotentes, Jaime y Elena. Su instagram es indecente y ofensivo. Un disparate social impresentable. Para ella, dar apoyo a buenas causas no es a Open Arms sino a Möet Chandon:
123 mil seguidores in crescendo viendo bolsos de dior, champán caro y chicas pijas haciendo postureo. Tratándose de la tercera en la línea de sucesión de Leonor, por debajo de Sofia y Froilán, alguien de Zarzuela tendría que decirle que ya es adulta y que un día, sólo un día, cuelgue una foto dando de comer a un abuelo o a un enfermo terminal o a un huérfano. Parece la imagen de la campaña "Apadrina una botella de Möet". Núria Marín reclama lo mismo que todos los súbditos a los royals: menos impudicia, menos estulticia y más decencia.