Pablo Urdangarin y Johanna Zott experimentan un profundo amor que ha resistido las pruebas de la distancia. Durante el verano pasado, vivieron apasionadamente sus vacaciones en Menorca y Palma de Mallorca, incluso en la casa de los padres de Johanna. Sin embargo, evitaron Marivent debido a la presencia de Felipe y Letizia, siguiendo estrictamente las normas. Aunque su relación es reciente, se encontraron con complicaciones inesperadas que han afectado sus cimientos.
Johanna Zott se prepara para enfrentar un futuro separada de Pablo Urdangarin. Mientras él se desempeña en el equipo de balonmano Granollers, ella se mudó a Munich para participar en un programa de intercambio Erasmus durante su último año de Medicina en la Universitat de Barcelona. Aunque se conocieron en el Liceo Francés de Barcelona hace años, en ese momento eran simplemente amigos. Su reencuentro posterior se produjo gracias a su mutuo interés en el deporte.
Hasta ahora, Johanna Zott no había faltado a ningún partido de Pablo, pero actualmente esto resulta incompatible. Pablo intenta aprovechar cualquier tiempo libre con su equipo para visitar a Johanna, incluso sacrificando su presencia en el cumpleaños de Leonor. Como gesto sorpresa, viajó a Munich durante la festividad de Todos los Santos.
Pablo y Johanna, más distanciados que nunca por culpa de sus padres
Sin embargo, la familia Zott, que inicialmente se enorgullecía de tener al hijo de Iñaki y Cristina, sobrino del rey y nieto del emérito, ya no lo ve con los mismos ojos. Han advertido a la pareja, lo que ha llevado a cierto distanciamiento. Dada la complejidad y el costo de los estudios de Johanna, su familia no desea que la relación afecte negativamente sus logros académicos, a pesar de la brillante carrera que ha tenido. Aunque Johanna cree que puede equilibrar ambas cosas, sus padres preferirían que tomara un descanso con Pablo si no prioriza sus estudios. La relación entre Pablo y Johanna se ha enfriado, al igual que la conexión con los padres de él.
La distancia se ha convertido en un problema significativo entre ellos. Pablo y Johanna se ven con menos frecuencia, y personas cercanas afirman que ya no están tan pendientes de sus teléfonos móviles. Johanna se encuentra enfocada en sus estudios, atendiendo a la petición de sus padres, y disfruta de su tiempo con amigos y amigas.