Pablo Urdangarin se quedó en Barcelona cuando sus padres volvieron de Washington y se instalaron en Ginebra. Al cumplir la mayoría de edad, el joven quiso cumplir su sueño de jugar en el FC Barcelona, como su padre. Pero la sombra de Iñaki Urdangarin le pesa demasiado y no ha lograd llegar a su altura. Ahora, el joven milita en el Granollers FC, pero tampoco logra destacar. Es un club con menor importancia.
El hijo de la infanta Cristina cree que Felipe VI y Letizia estarían detrás de su fracaso en el mundo del deporte. Iñaki Urdangarin tuvo una época dorada, fue uno de los deportistas más premiados y famosos del momento en el balonmano. Una figura que ya no fue recibida con buenos ojos por Juan Carlos I y la reina Sofía cuando su hija les presentó a su pareja. Era plebeyo y famoso. Los reyes no querrían que el hermano de Juan, Miguel e Irene e hiciese tan famoso con el apellido Borbón a su espalda. Prefieren que todos los miembros de Casa Real mantengan un perfil bajo. Máxima discreción.
Hasta hace un año los Urdangarin nunca han dado ningún problema a Casa Real. Eran Victoria Federica y Froilán los que más quebraderos de cabeza daban a la corona. Sin embargo, en los últimos meses los hijos de la infanta Cristina han decidido tomarse un año sabático. Miguel e Irene vivieron en Zarzuela, el joven todavía continúa con la reina Sofía.
Pablo Urdangarin no se pronuncia sobre Felipe y Letizia
Con el último movimiento de Pablo Urdangarin ha quedado patente que el joven no tiene ninguna relación con Felipe ni con Letizia, tal y como han demostrado otros sobrinos, como Froilán o Victoria Federica. La semana pasada, la joven salió en defensa del monarca por el episodio sufrido el pasado domingo, pero olvidó por completo a la reina.
Después de la reprimenda a Victoria Federica por esta actitud, Pablo Urdangarin también se ha pronunciado al respecto. Han sido los reporteros los que le han abordado en la calle, como ya hicieron cuando sus padres anunciaron el divorcio. Él fue el portavoz de la familia. El joven ha expresado su solidaridad con los damnificados: "Me sabe fatal y espero que estén todos bien, y que les mando mucha suerte", ha señalado al los reporteros mostrando empatía ante la situación que ha dejado importantes daños materiales y humanos.
Sin embargo, cuando le preguntaron por el papel de sus tíos en su visita a los afectados por la DANA, Pablo Urdangarin huyó diciéndoles un “hasta luego”. Cuando hay que hablar de los reyes ni una sola palabra. Sabe perfectamente que no debe pronunciarse, pero tampoco tiene relación con ellos.