Pablo Urdangarin es una rara avis en la Familia Real: el único nieto de Juan Carlos que sabe qué es trabajar. Intenta seguir los pasos del padre, en el buen sentido: jugando a balonmano, toda una leyenda deportiva al Barça. Debutó en la liga francesa, en Nantes, pero no acabó de cuajar. Pero eso lo enchufaron en el club culé, donde se entrena desde hace meses. Pablo tiene 20 años y vive en Barcelona, lejos del resto del núcleo familiar. Y mientras espera encontrar un equipo donde hacer carrera, tiene que llenar su tiempo libre como los jóvenes de su edad, aunque sea un privilegiado viviendo en Pedralbes. ¿Qué quiere decir esto? Disfrutar del universo de las redes sociales, y de la plataforma de moda (quizás mañana ya no) entre la juventud: Tik Tok. Allí ha hecho su estreno, luciendo un nombre que suena a chiste: "pablito urdangito".

Pablo Urdangarín jugando a balonmano / GTRES

Pablo Urdangarín, con chándal del Barça, se molesta con la prensa en Barcelona / Antena 3

No se puede decir, sin embargo, que el segundo hijo de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin haya hecho un aterrizaje de impacto como tiktoker, cuando menos en cuanto a la poca calidad ni originalidad del material que exhibe. De visitas sí que va bastante bien, pero es que su nombre es muy goloso para los fisgones. Más de 40.000 en cada uno de los dos vídeos cortos que ha publicado, en los que hace muecas al ritmo de la música. Y desgraciadamente hemos de decir que ni siquiera lo hace con arte. Está muy verde como influencer, si es que está pensando cambiar la pelota por el teléfono móvil. Tampoco mejora en otra muestra, haciendo dupla con un amigo. Entre sus cerca de 4.000 seguidores está la actual reina de las redes de la familia: Carla Vigo, hija del Érika, la hermana muerta de la Letizia. ¡Vigo ha memo el debut de su primo lejano con un "ese Pablo" que no pasará a la historia de la literatura, pero es mucho en este ecosistema. El virtual y el 'royal', claro.

perfil Pablo Urdangarin / Tik Tok

Pablo Urdangarin / Tik Tok

Carla Vigo / GTRES

Ojalá que Pablo domine mejor los fundamentos del balonmano que las habilidades artísticas y virtuales. Si no ya entendemos por qué no lo fichan en ningún sitio. Lástima, ya que si no encuentra un quehacer en su vida podría acabar imitando a su primo Froilán... u otros ejemplos familiares. Seguiremos atentos al urdangito tiktoker.