Juan Carlos I apareció finalmente en el cumpleaños de Leonor que se organizó la noche del 31 de octubre. Se marchó a Londres esa misma madrugada, ya que no se le dejó dormir en Zarzuela, y prefirió marcharse de dónde no es bienvenido. El emérito estuvo a punto de no aparecer en ese día tan especial para su nieta por las humillaciones de su hijo y su nuera. Los reyes le prohibieron aparecer en la jura de la Constitución en el Congreso de los Diputados, así como en el acto posterior en el Palacio Real. Letizia no quiere que la sombra del exmonarca perjudique el futuro reinado de su hija. Su imagen es intachable y la de su abuelo está totalmente dañada.
El emérito desea volver a España siempre que desee. Ya en las últimas ocasiones no ha pedido permiso a Felipe. Este año ha aparecido hasta en cuatro ocasiones, y planea una más. Igual que el año pasado, el marido de Sofía insiste en instalarse en España para celebrar la Navidad con su familia. En 2022 se le prohibió y se quedó solo en Abu Dabi. Por suerte, contó con la visita de grandes amigos y algunos familiares.
Si quiere pasar las navidades en España, Felipe y Letizia ya le han dejado claro que Madrid no es su sitio, y mucho menos Zarzuela. Las infantas Elena y Cristina ya han pedido a su hermano que Juan Carlos pueda venir estas navidades. Cada vez ejercen más presión en el rey, y por otro lado se encuentra la cara B, la reina.
Cristina y Elena desafían a Felipe VI
Los cimientos de Casa Real se tambalean. Cristina y Elena ejercen presión para que Juan Carlos se quede en Madrid a finales de diciembre. La infanta Elena ha ofrecido su casa para hospedarle. En caso de no poder venir a España, sus dos hijas y sus otros seis nietos ya han dejado claro que se marcharán a Abu Dabi unos días para estar con él. Incluso amenazan con llevarse a la reina Sofía. Sería todo un escándalo, no solo dejarían al descubierto la mala relación familiar, sino que además Felipe, Letizia, Leonor y Sofía estarían todos los días señalados completamente solos. No del todo, acompañados de Paloma Rocasolano, la madre de la reina nunca falta en ningún acto familiar. Es la protegida por la reina, por eso despierta los celos de la emérita.
Quedan pocas semanas para la Navidad. Las luces ya están preparadas en las calles y el frío empieza a notarse con los días mucho más cortos. Letizia empieza a tachar días en su agenda para un nuevo desastre familiar.
