En las próximas horas Iñaki Urdangarin ingresará en una prisión, probablemente madrileña, para pasarse allí los próximos 5 años y 10 meses de su vida. Con buen comportamiento, permisos y reducciones, no superará el año entre rejas. Pero los cronistas reales intentan explicar la excepcionalidad del momento. Pilar Eyre fue invitada estrella al programa Tot es mou de TV3 y allí se peleó con Máximo Pradera por decirle "petarda mentirosa y vacua" a Màxim Huerta. Pero después tuvo tiempo de hablar de Urdangarin y reveló cómo lo vive la familia vasca del cuñado del rey:
¿Cómo vive la familia real española la próxima entrada en la prisión de Iñaki Urdangarín? Nos lo ha explicado @pilareyre. Vídeo ya en la carta. #TotesMouTV3
— Todo se mueve (@totesmoutv3) 14 de junio de 2018
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Maravilloso el tertuliano que se hace el sorprendido y el ofendido cuando escucha que Juan Carlos quería influir en el TS para rebajar la pena de su yerno. El rey emérito es inimputable, inviolable e inmune. Los que creen en los unicornios, se sorprenden. Eyre va más allá cuando revela que la familia realmente destrozada no es la política: los Borbones van a la suya y Felipe y Letizia estarán en los EE.UU. cuando Urdangarin entre en prisión. Es la familia de sangre de Urdangarin la que está "destrozada" según Eyre. Así se desahogó Ana Urdangarin, hermana del condenado, hace un tiempo: "Ana, la que vive en Barcelona, le dijo a sus amigas: 'Si mi padre viviera quemaría la Zarzuela'".
Los dos consuegros no tuvieron demasiada conexión. El sr. Juan María Urdangarin era el típico empresario vasco del PNV casado con una francesa y con muchos hijos y nietos. A su muerte muchos miraron a Iñaki como el padre de familia que nunca ha sido. Pilar Eyre escribió en El Mundo hace unos años que Urdangarin no podía ir a comprar el pan en Barcelona sin que lo insultaran, y su hermana Ana tuvo que dar por acabada una comida en un restaurante cuando se malhablaba de su hermano recordando que su padre no habría tolerado que Juan Carlos saliera de rositas del caso Nóos. El emérito empujó a Iñaki a hacer negocios e hizo que Jaume Matas, y los del PP de Valencia, pagaran 6 millones públicos por nada al exduque de Palma. Si su padre levantara la cabeza se haría de la CUP, pero en lugar de quemar fotos de los reyes les quemaría la casa.
Eyre afirma que en la cárcel madrileña los compañeros le harán la pelota y no tendrá ningún problema de seguridad. Lo que puede pasar es que algún listillo venda imágenes de Urdangarin dentro de prisión como se ha hecho con Junqueras, Romeva y Forn. ¿Cuánto vale esa foto?