La Nochebuena en Zarzuela, que debería ser una ocasión de unión familiar, se ve nuevamente ensombrecida por las tensiones familiares. La crisis entre Felipe y Letizia, la animadversión entre la reina y sus cuñadas, las infantas Elena y Cristina, la repercusión de los escándalos de Juan Carlos I… Pero las polémicas no llegan solo del lado de los borbones. También las hay entre los padres de la reina Letizia, Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz.

Desde el inicio de su reinado, Letizia ha mostrado una inclinación a rodearse de quienes considera pilares fundamentales en su vida, con un lugar destacado para su madre, Paloma Rocasolano. Paloma, quien ha sido una figura clave en la crianza de la princesa Leonor y la infanta Sofía, estará presente en la cena principal de Zarzuela junto a Letizia, el rey Felipe VI y sus hijas.

Letizia y Paloma Rocasolano
Letizia y Paloma Rocasolano

Relación rota entre los padres de la reina Letizia

Quien no está invitado es el padre de Letizia y ex marido de Paloma, Jesús Ortiz. El distanciamiento entre Letizia y su padre es una de las grietas familiares más visibles. Jesús Ortiz, quien se divorció de Paloma Rocasolano para iniciar una nueva vida con Ana Togores, ha quedado prácticamente apartado de los eventos familiares importantes.

Este alejamiento no solo se refleja en la ausencia de Ortiz en actos simbólicos como la graduación o el último cumpleaños de Leonor, sino también en su exclusión de las celebraciones navideñas. Mientras Paloma ocupará su lugar en la mesa de Nochebuena, Ortiz ni siquiera ha sido considerado para asistir.

Ana Togores con Letizia
Ana Togores con Letizia

La figura de Ana Togores, pareja de Jesús Ortiz, ha sido motivo de fricción desde el principio. Con una edad cercana a la de la propia Letizia, Togores no solo despertó el rechazo de la reina, sino también el de Paloma Rocasolano, quien mantiene una relación completamente rota con su exmarido. Este malestar se refleja en comentarios de allegados, que aseguran que "no se pueden ni ver". La frialdad entre los padres de Letizia ensombrece cualquier intento de conciliación familiar, y Zarzuela no será el lugar donde se logre un acercamiento.