Paloma Rocasolano ha gozado de muchos privilegios desde que su hija Letizia entró a formar parte de la monarquía española. De sus padres, Paloma es la favorita de Letizia. No se lleva demasiado bien con Jesús Ortiz. Sobre todo desde que el ex periodista se casó con Ana Togores, una mujer que tiene la misma edad que la reina. En cambio, alaba la relación que su madre tiene con Marcus Brandler. 

Asimismo, Paloma siempre ha tenido abiertas las puertas de la Zarzuela. Rocasolano ha entrado y salido cuando ha querido. Y ha sido quien más ha cuidado de la princesa Leonor y la infanta Sofía. Mucho más que la otra abuela, la reina emérita Sofía. La reina Letizia siempre se fio mucho más de su madre que de su suegra. Y Sofía ha lamentado más de una vez que no le dejan ver a sus nietas. 

Paloma Rocasolano, como Pedro por su casa por Zarzuela 

Cabe decir que es comprensible. Sofía ha tenido que lidiar con actos institucionales, mientras que Paloma ha tenido mucho tiempo libre para estar con las nietas. Y Letizia prefería que sus hijas estuvieran siempre con la misma persona. Paloma, jubilada, podía cumplir ese papel. Sofía no. Y la reina no quería estar llamando a su madre al interés de su suegra, que no iba a sacrificar rodearse de la jet set para estar con sus nietas a todas horas. 

Paloma Rocasolano y reina Sofía
Paloma Rocasolano y reina Sofía

Sea como sea, lo cierto es que estos privilegios se le habrían subido un poco a la cabeza a Paloma. Se piensa que los puede extrapolar a fuera de los muros de palacio por ser la madre de la reina. Así lo demuestra lo que hemos podido saber en ElNacional. 

Paloma Rocasolano no es bienvenida  

Según nos cuentan, hay una tienda muy exclusiva de Madrid, situada en una calle muy conocida, en la que Paloma tiene muy mala fama. Conocen su modus operandi y están bastante hartos. Consideran que se aprovecha de su condición.

Al parecer, Paloma compra ropa, se la lleva y a los 15 días (sospechan que después de usarla) la devuelve. Cuando la ven entrar ya tiemblan, pues saben lo que pasará. Que si no se acaba de ver, que si no le queda como esperaba, que si no es su estilo... Lo ha hecho más de una vez y ya le han visto el plumero. Pero claro, es la madre de la reina, qué le van a decir...