La situación de Carla Vigo, sobrina de la reina Letizia, ha despertado una gran preocupación en su entorno cercano. Hace algunos meses, la joven fue vista en el barrio de Chueca con varias partes de su cuerpo vendadas, incluyendo el cuello y las muñecas, lo que generó inquietud entre quienes la conocen. Actualmente, Carla atraviesa un momento complicado en su vida: ha perdido su empleo y ha tenido que regresar a vivir en un piso tutelado, donde paga un alquiler de 1.500 euros al mes. Además, mantiene una relación sentimental con un futbolista catalán que, según allegados, no sería la mejor influencia para ella.
Un episodio reciente ha incrementado la preocupación de su familia. Carla quiso que su pareja estuviera presente en su cumpleaños, pero él alegó no tener dinero para viajar. Para ayudarlo, ella le prestó 200 euros para cubrir el costo de los billetes. Sin embargo, al día siguiente, según el relato del joven, ese dinero fue robado. Este hecho ha hecho que personas cercanas a Carla sospechen que su novio podría estar aprovechándose de su generosidad.
Esta no es la primera vez que se cuestiona el círculo social de Carla. Cristina Rapado, quien en el pasado fue una de sus amigas más cercanas, ha expresado abiertamente su preocupación. Según Rapado, las personas que rodean actualmente a Carla no tienen buenas intenciones. Incluso ha mencionado a su representante, a quien considera alguien que busca únicamente su propio beneficio, llevándola a eventos con fines lucrativos sin pensar en su bienestar.
"Siempre quise a Carla como a una hermana y traté de ayudarla a abrirse camino en el mundo del espectáculo", ha declarado Cristina Rapado. "Le brindé apoyo para que trabajara como modelo y hasta le ofrecí colaborar en el corto Sole, que estoy desarrollando junto a Antonio Resines. Lamentablemente, dejó que su entorno la influyera negativamente y decidió no participar. Ahora, viendo el éxito que está teniendo la película, estoy segura de que se arrepiente".
No consiguen alejar a Carla Vigo de las malas compañías
Rapado también señaló que Carla se está alejando cada vez más de su familia y de personas que realmente se preocupan por ella. En los últimos días, la joven ha sido vista nuevamente en conciertos y reuniones con amigas que, según algunos, no la estarían ayudando a encaminar su vida profesional. Esta combinación de malas influencias y decisiones erróneas estaría contribuyendo al distanciamiento de Carla con su familia y a la dificultad para avanzar en su carrera artística.
A pesar de todo, quienes la aprecian no pierden la esperanza de que pueda retomar el control de su vida y rodearse de personas que realmente le hagan bien.
Paloma Rocasolano y Jesús Ortiz siempre están muy pendientes de ella, han ejercido de abuelos, pero también de padres en ausencia de Erika Ortiz, ayudaron en todo a Antonio Vigo, también Letizia, aunque no quiere que se haga público, le pasa dinero todos los meses, aunque no le está gustando el fin que le está dando.
Esta última semana han vuelto a ser alertadas por su comportamiento, Carla Vigo volvió a salir con estas malas compañías de las que no consiguen distanciarla.