Juan Carlos y Sofia, el matrimonio emérito, representa la obra de teatro "Amor real en la 3ª edad" yendo hasta Galicia para que el monarca de 81 años haga ver que pilota un barco. Aprovechando la reconciliación pública, quien sabe más de los amores de Juan Carlos se despacha a gusto. Pilar Eyre aprovecha el blog en Lecturas para explicar que la poligamia, furor sexual y amor náutico le vienn de lejos al emérito.

EFE

Escribe Eyre a Lecturas: "Don Juan Carlos ha visitado el Juan Sebastián Elcano ¡junto a Sofía! ¿Sabrá la pobre reina que el don Juanito que se embarcó como guardiamarina en 1958 estaba loco de amor por una disoluta condesa italiana, y que fueron precisamente su padre y Franco los que le obligaron a enrolarse en el buque escuela para alejarlo de ella?". En sus muchos libros y artículos, Pilar Eyre ha documentado la juventud del príncipe Juan Carlos cuando Don Juan y Franco se temían que habría muchos herederos ilegítimos si dejaban solo a J.C. La mejor manera que no mantuviera relaciones sexuales diversas era enrolándolo en un barco.

GTRES

Concluye Eyre: "Tarea inútil, porque durante la travesía don Juanito le envió a Olginha de Robilant decenas de fogosas cartas en las que le revelaba que “esta noche en la cama he pensado que estaba besándote, pero me he dado cuenta de que no eras tú, sino una simple almohada arrugada y con mal olor”. Juan Carlos tenía sueños húmedos con su amante pero en realidad estaba abrazándose, o cosas peores, con un cojín maloliente. Iba más salido que un mono. Qué diferencia con su vida actual, de la mano de Sofía. De aquella época solo queda el nombre de su barco.

EP

El Bribón es ahora un velero para competir de regatas con el cojo Juan Carlos encastado como un clavo. La historia de amor con la condesa disoluta acabó como todas: con Juan Carlos siéndole infiel con otra: "En Brasil Juanito se enamoró de una sensual carioca, y en el viaje de vuelta a España se carteaba también con ella. Fue cuando Franco le comentó a su primo "al príncipe hay que casarlo". ¡Y ahí apareció Sofía, la griega"!. Es decir que la historia de amor que nos vende Zarzuela fue buscar bromuro griego para el fogoso Juan Carlos.