Pilar Eyre ha escrito sobre Letizia centenares de columnas en la revista catalana Lecturas y esta semana revela que la reina de España es una entre los millones de espectadores que sintonizan Rocío, la entrevista de 13 capítulos que emite Telecinco. La mujer de Felipe VI está enganchada a la pantalla ya que la única familia que supera en truculencia a los Borbones son los Jurado. "Letizia está volcada en el tema Rociíto. Se ve los docudramas, llama a sus amigas periodistas para preguntar por la trastienda del asunto y coge partido apasionadamente".
Letizia en Telecinco
Una de las antiguas reporteras de Sálvame, Adriana Abenia, consiguió hablar con Letizia en un reportaje y así lo explica Eyre: "Aún se paraba a hablar con los reporteros cuando la abordaban por la calle, como cuando la encantadora Adriana Abenia le preguntó si cuando viajaba le dejaba comida preparada a Felipe en la nevera: "Pues la verdad que no, para que voy en engañarte'". Aquella espontaneidad se acabó cuando Letizia supo que Zarzuela y Juan Carlos utilizaban los rumores de la vida privada de Letizia para tapar el fraude fiscal y el adulterio del jefe del Estado.
Adriana Abenia y Letizia, Antena 3
El clic que convirtió a Letizia en arisca, desconfiada y amargada en público son dos maledicencias: "Todo fue cambiando a medida que la prensa arremetió con críticas que ella consideraba injustas, hasta que llegó en sospechar que eran cotilleos que se favorecían desde la Casa para apartar la atención de la conducta irregular de Juan Carlos. Despertarse cada día con una alusión malintencionada a su delgadez o el recuerdo exagerado de la humildad de su familia fue amargando su carácter y minando la confianza en sus antiguos colegas".
Letizia con mala cara, hoy GTRES
La ruindad del suegro le hizo difundir que Letizia era anoréxica y que su familia, la Ortiz, era pobre. Muchos columnistas afines, de Peñafiel a Ussía, han hecho el trabajo sucio: señalar a Letizia cuando el corrupto original es Juan Carlos. Eso no quiere decir que Letizia sea una santa. Su primo David Rocasolano ha escrito sobre los negocios turbios de Felipe y Letizia. Y eso sí que toda la prensa lo ha silenciado.