Si hay una periodista en España que sabe mucho sobre la monarquía y sus secretos, esta es, junto con Jaime Peñafiel y Pilar Eyre, Pilar Urbano.
La escritora, biógrafa de la reina Sofía, y autora de La pieza 25, sobre el caso Nóos, ya reveló para En Blau hace unos meses que uno de los puntos débiles de Juan Carlos es su machismo y como utiliza a las mujeres. Posteriormente, cuando salieron a la luz las conversaciones de Corinna con Villarejo, Urbano fue muy dura con el rey emérito: "Si Felipe está intachado y expulsa lo corrupto como cualquier perro hará bien. No soy republicana pero queremos un rey limpio y una familia limpia. No puede ser prisionero del CNI ni de Villarejo".
Ahora, en una entrevista concedida al periódico digital El salto, la cronista dice algunas de las reflexiones más duras que se le recuerdan sobre la Casa Real, especialmente sobre la figura del rey Juan Carlos: "La casa más oscura de España es la Zarzuela. Las preguntas son ceremoniosas, y las respuestas son banales, artificios de cortesía teatral, para contestar sin decir nada". De hecho, sin embargo, Urbano no se escandaliza delante de este retrato: "En realidad, eso es una monarquía, escenificación, pompa y solemnidad".
Urbano, hablando de la relación de Corinna con el rey emérito, "el noviazgo", como ella misma dice, apunta que "Es sabido que ella viajaba con el rey o diciendo que iba en nombre del rey. Con puntería, José Bono la llama siempre "la bella comisionista". Un Juan Carlos de quien dice que "ha tenido que irse porque la corona estaba manchada, desprestigiada. Él no quería, pero no había otro remedio", y una transparencia que a menudo, brilla por su ausencia: "¿Transparencia? Sí, y no solo de las cuentas y los gastos de la corona. Tenemos derecho a saber a quién ha recibido el rey. El rey, el que sea, mueve muchos hilos, y no son precisamente hilos de juguetes de guiñol, son intereses nacionales. Afectan al bolsillo. Y no es admisible que los negocios de alto bordo se resuelvan en una alcoba o en el palco del Bernabéu, o en una cacería en Rusia o en unas competiciones de Fórmula Uno en Abu Dabi. Por eso hablo de “casa oscura".
Un Juan Carlos de quien dice que "Historia en mano, Juan Carlos de Borbón le debe el trono a Franco. Pero también a Estados Unidos. Son Nixon y Kissinger quienes, en el año 63, envían a Vernon Walters a El Pardo para preguntarle a Franco “¿cuándo corona al rey? Franco contestó “dígale al presidente Nixon que aquí no habrá revolución porque ‘dejo el freno echado. Yo encontré una España arruinada y pobre, y dejo clases medias".