Juan Carlos y Felipe se volvieron a ver las caras el pasado lunes en Zarzuela, con motivo de la celebración por el 24.º aniversario de Victoria Federica, una Victoria Federica, la preferida por el emérito, que no se esconde, que recibió los consejos del yayo antes de ir a la tele a ser entrevistada por Pablo Motos en El hormiguero. Una celebración familiar que reunió a la créme de la créme de los Borbones, con los dos monarcas, con la reina Sofía, con las infantas y con tres de los hijos ninis de Cristina. En cambio, quien no estuvo fueron ni Letizia ni sus hijas Leonor y Sofía. A la asturiana le lame un pie la sobrina de su marido y todavía más su padre.

Juan Carlos llegando al cumpleaños de Victoria Federica / Telecinco

Un Juan Carlos que llegaba así en coche a la cita y que tuvo tiempo, no solo de disfrutar con los suyos una vez más, en esta nueva visita a España, sino que también asistió a dos funerales de dos personas importantes para él, su sobrino Juan Gómez-Acebo y Alejandro Fernández de Araoz. Juan Carlos está harto de vivir a kilómetros de distancia, en la soledad de Abu Dhabi, que considera una jaula dorada, y haría lo que fuera por que los suyos lo aceptaran nuevamente y volviera a ser bienvenido en Zarzuela de manera definitiva y no esporádica, como el cumpleaños de Vic. No entiende que se le diera la patada hace cuatro años e insiste en su inocencia. Pero sabe que su hijo Felipe no cederá: ahora que ha alejado a su polémico padre del día a día monárquico, sería un paso atrás desdecirse.

Felipe y Juan Carlos GTRES

A pesar del revés constante de Felipe (y sobre todo Letizia) a acoger nuevamente a Juan Carlos y recibirlo con los brazos abiertos, Juan Carlos sigue haciendo su papel, aunque incluso lo hayan hecho dormir en un hotel, el Four Seasons de Madrid, en lugar de su cama de Zarzuela. ¿El de rey? No, el de padre. Concretamente, el de padre preocupado, que por mucho que pasen los años y los hijos se hagan mayores, por mucho que tu hijo sea ni más ni menos que un rey, el rey de España, siempre estará preocupado para que le vayan bien las cosas... O para que le vayan bien a la monarquía... Eso es lo que se desprende de lo que ha pasado estos días en su nueva visita al país. Porque según lo que explica Lecturas, el emérito ha aprovechado los encuentros de estos días con amigos y conocidos, empresarios, nobles y poseedores de grandes fortunas, para dejar cara una "preocupación" que tiene detrás de la oreja, transmitirles un mensaje sobre su hijo Felipe.

Felipe, Juan Carlos y Letizia GTRES

¿Cuál? ¿Qué les dice el monarca? A todos les hace llegar un mensaje que es siempre ‘apoyad a mi hijo’. Es su mayor preocupación cuando habla con su circulo de amigos”, explica la periodista Sandra Aladro al programa Vamos a ver. En contacto permanente con amigos y empresarios, el Borbón insiste en que su hijo tenga todo el apoyo que haga falta, por parte de las altas esferas, la élite española y quien tiene la pasta, para que la silla monárquica no se vea en peligro y sigan alargando en el tiempo esta institución desfasada: "Juan Carlos estaría muy preocupado por el estado de su hijo y la salud de la monarquía. De ahí ese mensaje que quiere transmitir a los pesos pesados de la sociedad española". Ah, y avisa: “Círculo que cuenta con él para todas las cacerías que están organizando para este año, él les ha confirmado que aquí estará todas las veces que se cuente con él. Son distintas citas y el rey Juan Carlos ha confirmado que estará con ellos. Es posible que no nos enteremos pero va a estar aquí mucho más de lo que ha estado en muchos años”.