Seguimos hablando de monarquías, ahora cogiendo un vuelo express de un microestado, Mónaco, hacia otro microestado, Luxemburgo. Ambos países tienen royals fantásticos. El caso de Carlota Casiraghi o Carolina de Mónaco, ambas siempre tan guapas, es muy parecido a lo que ocurre en Luxemburgo. Allí gobierna el Gran Duque Enrique, el cual tiene cinco hijos: Guillermo, Alejandra, Luis, Félix y Sebastián. Uno de ellos ha sido padre junto a Stéphanie, su mujer. Hablamos de la unión creada en octubre de 2012 entre ellos dos, de la cual han salido dos pequeños retoños. Carlos de Luxemburgo nació en 2020 y ahora lo ha hecho el bomboncito François.
François de Luxemburgo es el segundo de los hijos del matrimonio y, tal y como ha anunciado la Gran Casa Ducal, ha llegado hoy al mundo. Ha sido a las 10 y 4 minutos de la mañana cuando François le ha puesto cara a sus progenitores que tan bien lo han cuidado en estos meses de gestación, desde que el embarazo se anunciara el pasado mes de septiembre. François ha nacido en el Hospital Materno Gran Duquesa Charlotte pesando tres kilos y quinientos setenta y cinco gramos y midiendo 53 centímetros de altura. Ahora empezará a crecer a pasos agigantados... lo necesita. Y es que François es desde ya el 3º en la línea de sucesión al trono luxemburgués, después de su papá y su hermano Carlos.
La celebración real
Para celebrar la llegada de la nueva Alteza Real de Luxemburgo, el Principado organizará veintiún disparos de salvas. Así lo explicaba el comunicado de la Casa Real del país: "El Mariscal de la Corte informa que el nacimiento del 2º hijo de Sus Altezas Reales el príncipe heredero y la princesa heredera será recibido por un saludo de 21 carretas disparadas desde el Fetschenhaf". El Fetschenhaf es el palacio real de Luxemburgo.
Además, en el comunicado difundido, se explica que "el príncipe heredero, la princesa heredera y su hermano, el príncipe Charles, están ansiosos por presentar al príncipe François". Ojalá nosotros también conociéramos a este bonito niño.
Carlitos, desplazado
Nuestro Carlitos preferido es Alcaraz, pero hay que decir que Carlitos de Luxemburgo es también muy mono. El hermano mayor de François tiene casi tres años y ahora se verá relegado por la presencia de un nuevo miembro en casa. La llegada al mundo del nuevo hijo de los príncipes herederos hará que las tareas se multipliquen por dos en Fetschenhaf, y ahora sin la "ayuda" de la pandemia. Y es que cuando nació Carlos, la pandemia estaba en su máximo auge, por lo que el hijo de los Grandes Duques -Enrique y María Teresa- y Stéphanie tuvieron todo el tiempo del mundo para cuidar de su hijo al estar los tres recluidos en casa. Además, también les vino bien convertirse en padres con tal de acallar o, al menos, disminuir los rumores que apuntaban a una posible tiranía casera de María Teresa. Ahora son otras época, pero la faena se les multiplica por dos. Ánimo y enhorabuena.