Ni sanjacobos. Ni bollería industrial. Ni azúcar. Ni dulces. Ni fritanga. Ni pasta en abundancia. Ni salsas. Ni patatas fritas, y si no, que se lo pregunten a Felipe que un día, incluso, yendo a comer con amigos, sin Letizia, le pusieron un plato de patatas fritas y cuando el camarero se lo quería llevarse antes de que se hubieran acabado, él pidió que no lo hicieran porque en casa no le dejaban comer.

En Zarzuela, cualquiera que se dedique a la alimentación de palacio corre el riesgo de perder su trabajo como ose llevar alguno de estos productos a casa de los reyes. De hecho, en Zarzuela y en la escuela donde antes estudiaba la princesa Leonor y donde todavía va su hermana, la infanta Sofía, Santa María de los Rosales.

La infanta Sofía y la princesa Leonor, diciendo adiós a los dulces o las patatas fritas / GTRES

Porque de todos es sabida la obsesión enfermiza de la reina Letizia por controlar todo lo que comen sus hijas, e incluso, su marido. La asturiana es como una especie de policía de la comida healthy y empieza a combustionar cuando ve delante suyo un plato con abundancia de grasas saturadas.

A la escuela de las niñas ya les dejó las cosas claras y en su día ya se encargó de censurar el menú y establecer unas normas nutricionales por lo que hacía referencia a lo que comían sus hijas en el centro.

Letizia, controlando cómo sus hijas comen sopa de acelgas en Zarzuela / @CasaReal

Pero ahora, y durante dos años, no podrá hacer todo lo que quiere, en materia alimentaria, ya que el internado de Gales donde ahora está estudiando su hija está a muchos kilómetros de distancia y allí hay unas normas establecidas difíciles de modificar.

Ya nos imaginamos a la princesa Leonor feliz por no encontrar cada noche a la hora de la cena un plato de acelgas o cremas de color verde, que quizás son muy sanas, pero que son aburridas a matar. También imaginamos que cuando Letizia vea unas imágenes sobre el UWC Atlantic College montará en cólera.

Uno de los comedores del UWC Atlantic College / @uwcatlantic

La revista Vanitatis ha informado sobre qué y cuándo comen Leonor y sus compañeros de internado. Explican que se ha tenido que adaptar a las normas, por ejemplo, referidas a los horarios sobre las comidas. El desayuno se sirve temprano, entre las siete y cuarto de la mañana y las 7.50. Después, pausa para el café sobre las 10.25.

La comida se sirve entre las 12h y las 13.45 del mediodía y la cena... horarios ingleses, entre las 17.30 y las 19h, cuando en Zarzuela prácticamente ni han empezado a merendar.

La princesa Leonor, en el internado de Gales / GTRES

En Santa María de los Rosales, la princesa de Asturias sólo tenía una vez al mes huevos fritos con patatas y dos veces comía pasta. Carne roja, poquísima. Mucha verdura y nada de pasteles. Pero el citado portal revela que gracias a las redes sociales, se han podido ver algunas de las comidas que tienen en Gales los alumnos del internado.

Así, hemos visto que para desayunar hay cada día la posibilidad de comer huevos fritos para desayunar, además de burritos, pasta cocinada de todo tipo o, atención, "si los garbanzos con ensalada de espinacas no terminan de convencerles, siempre pueden aprovechar para disfrutar de un brownie calentito antes de irse a la cama". Pam. Brownie cada noche. Letizia a punto del colapso.

...Que los alumnos del UWC Atlantic College coman tantos brownies como puedan. Que se los escondan bajo la almohada. Porque cualquier día de estos ya nos imaginamos a Letizia cogiendo un avión hacia allí y tirando todas las existencias de pastel que queden a la basura.