La Corona de Felipe se tambalea, su reinado vive el peor momento de imagen. No por unos cuernos de hace 12 años sino por esta absurda estrategia de querer censurar una noticia en pleno 2023. Alguien se había creído que las confesiones del antiguo novio, cuñado y amante de Letizia se podían tapar. Es como creer que taparás la luna con el dedo. El silencio siniestro que rodea la infidelidad de Letizia solo hace que aumente la sensación que la Corona y los que la apoyan han perdido el sentido de la realidad. Zarzuela lo demuestra enviando un Christmas de papel con una imagen que no se corresponde con lo que proyecta hoy el matrimonio real: una familia feliz de cara a la galería. Dentro esconde mucha porquería. Leonor y Sofía no sonreían como en la felicitación de Navidad cuando se enteraron por twitter que su madre engañaba a su padre con el "tío Jaime", el marido de tía Telma. El Christmas visto hoy es un espanto:

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Felicitación de Navidad de la Corona, 2023, GTRES

Toda España sabe quién ha movido este escándalo para perjudica a Felipe: la derecha y la ultraderecha (política, mediática, judicial, funcionarial...) que pretendían que el rey se negara a proponer a Pedro Sánchez como candidato a la investidura. Un mero formalismo que desde que reina Felipe se ha convertido en un circo: Rajoy le negó al rey ir a una investidura fallida, Felipe ahora proponiendo a Feijóo sin tener los votos y Felipe bajo la sombra que podría no proponer a Sánchez pese a tener los votos. Juan Carlos parece un estadista al lado de Felipe. Jaime Del Burgo y Jaime Peñafiel, autores intelectuales de la publicación de los cuernos de Letizia, tienen en común ser muy juancarlistas y muy de derechas. Se han puesto de acuerdo para clavar una patada a Felipe en el culo de Letizia. Del Burgo no lo esconde y en los tuits donde revelaba la relación extramatrimonial de Letizia publica que él, que conoce muy íntimamente a la reina, la sitúa ideológicamente a la izquierda del PSOE y sostiene que ella ha convencido a Felipe de dejar hacer a Sánchez. Y por eso se los carga, a ella por sanchista y a él por calzonazos.

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Felipe, Letizia y Leonor, cabizbajos, hace pocos días, GTRES

La estrategia de la derecha y la ultraderecha es negar esta evidencia. El medio más afín en Abascal y Feijóo, Es Radio, ha promovido una nueva teoría sobre quién está moviendo a Del Burgo, y el nombre es bestial: el rey Juan Carlos. Este ha sido el discurso matinal del portavoz y gurú de la Derecha, Federico Jiménez Losantos:"Es la enésima campaña contra Felipe VI orquestada desde las instituciones y los medios de comunicación que se sitúan en su entorno. Pero quien mueve todo es el entorno de Juan Carlos (Del Burgo y Peñafiel). Todo viene del caso Urdangarin cuando Felipe dice 'Hasta aquí, esto hay que pararlo' porque teme heredar una corona manchada. Pero el resto de la familia se sitúa al otro lado. Sofía apoya a Cristina e Iñaki en público, Juan Carlos no lo censura y Felipe se queda solo. Juan Carlos no va a la coronacion de su hijo porque está cabreado con él. Todo lo que está saliendo ahora es contra la Corona y Felipe VI. Los Reyes con la edad se hacen muy malos".

Juan Carlos come un bocata GTRES
Juan Carlos comiendo con voracidad, Sanxenxo hace pocos días GTRES

Aparte de citar a Pedro Sánchez como la bestia negra de la Derecha que, según su obsesión, se beneficiaría de la caída de la Corona, el nombre de que revela Losantos tras todo este escándalo, el de Juan Carlos, no es ninguna locura. Del Burgo quiso ponerse en contacto con el emérito antes de la abdicación para impedirla y no se lo permitieron. El amante de Letizia defiende a Juan Carlos como el rey que tendría que seguir siéndolo porque solo la muerte puede poner fin a su reinado. Y Peñafiel no se ha cansado de criticar a Felipe por expulsar a su padre de España. Losantos advierte cuál será la próxima víctima a abatir: "Habrá campaña contra Leonor, sin ninguna duda". El pistoletazo de salida lo dio Telecinco, la cadena de Borja Prado, hijo de la mano derecha de Juan Carlos, Prado y Colón de Carvajal, haciendo pública la noche de vodka de la princesa, con privilegios VIP y prepotencia en una discoteca hasta las 6 de la madrugada. Juan Carlos a los 86 años es Nerón: ha enloquecido y quiere que arda todo.