Sofía de Borbón es una caja de sorpresas. Multitud de anécdotas se saben sobre ella y sobre su hermana, la princesa Leonor. Ambas es sabido que tienen bolsas y bolsas de sangre repartidas por bancos de Europa, ya que, cuando nacieron, Don Felipe y Doña Letizia entregaron parte de la sangre del cordón umbilical a la ciencia para regenerar con células madre. Sofía, además, sabe que, si todo va bien, ella no será la heredera del trono, ya que esta será Leonor y, luego, los posteriores hijos que tenga la primogénita de los Reyes de España. En un tiempo deberá decidir si sigue con el título de infanta y, por lo tanto, sigue representando a la corona día y noche, o bien si renuncia y se dedica a su ilusión profesional, que ahora parece que podría ser el fútbol. Hoy, más allá de eso, contamos una curiosidad de los primeros días de vida de Sofía.
Vamos muy fuertes con esta anécdota, ya que es muy poco conocida. De Sofi se suele saber lo típico: que es educada, que es más alta que Leonor, que le gusta el fútbol, que se ha confirmado recientemente, que acudirá al UWC Atlantic College de Gales a partir del próximo curso... Pero no se habla mucho de cómo fue su bautizo. Igual que todos los miembros de la monarquía española, Sofía fue bautizada de una manera muy especial. Os lo contamos...
Sí, no fue un bautizo igual que los de los ciudadanos de a pie. Desde hace más de 400 años que los descendientes de los Reyes de España tienen un bautizo a la carta, diferente al que tú puedes haber tenido. Es especial, ya que se aplica una técnica única, solo para la realeza. El bautizo de Su Alteza Real tuvo entonces dos hechos ya míticos: se utilizó agua típica del río Jordán, traída especialmente para la ocasión por los padres agustinos, así como una pila única. Se trata de la pila bautismal de Santo Domingo de Guzmán, con cuatro siglos de historia y en la que se llevan bautizando a todos los hijos de los Reyes del Reino de España. Muy muy fuerte.
Un bautizo peculiar
Si ahora el principal problema de las elecciones del 23-J convocadas por el Presidente del Gobierno es la calor, imagínense bautizarse en pleno mes de julio. Fue, concretamente, el día 15 de julio del año 2007 cuando Sofía recibió el baño de regeneración y de renovación del Espíritu Santo en los jardines del Palacio de la Zarzuela. Fue en aquella fecha y en este sitio cuando Sofía fue cristiandada. ¿El motivo de hacerlo en un exterior? Las elevadas temperaturas en la capilla de La Zarzuela, un auténtico horno. "Aprovecharon los jardines para improvisar un pequeño altar rodeado de lujosas alfombras, justo en frente de la ermita en la que años atrás habían hecho la comunión Felipe VI y sus hermanas. La ceremonia religiosa fue celebrada por el cardenal arzobispo de Madrid Antonio María Rouco Varela, que estuvo asistido en todo momento por un rosario de monseñores", relatan en 'Marie Claire' respecto a aquella gran jornada que seguro que le quedó grabada para siempre en la memoria de Sofi.