Después de unos días donde Letizia, deliberadamente, ha estado apartada del foco, intentando convivir como puede con todo el escándalo Del Burgo, a raíz de las declaraciones, mensajes y fotografías de su ex, capeando el temporal, que dirían, y pasando un calvario, segundo la gran Pilar Eyre, la asturiana ha vuelto a tener esta semana una agenda repleta de actos públicos. Una agenda que la ha llevado, por ejemplo, a Fitur este miércoles, la feria internacional de turismo de Madrid, donde, por cierto, les han querido hacer llegar un obsequio y sus remitentes se han quedado con las ganas por culpa del caos y el protocolo que ha habido en la feria.
Un día antes, la reina se dejaba caer por Lleida, en un acto de la Fundación Princesa de Girona, donde por ejemplo, forzó exageradamente la manera como decir correctamente el nombre en catalán de un cantante como Alfred Garcia, que no Àlfred, como le suelen decir los castellanohablantes.
Sobre la visita de la reina a tierras catalanas y sobre todo lo que está pasando con las declaraciones de Jaime del Burgo ha hablado la periodista en su colaboración habitual en el Tot es mou de TV3 al lado de Helena Garcia Melero. ¿"Por qué lo hace"?, pregunta la presentadora. Respuesta de Eyre: "Él dice que lo hace por patriotismo, patriotismo que no entiendo, porque hundir a la monarquía como la está hundiendo creo que es antipatriótico desde su punto de vista. Esto perjudica mucho a la institución. Yo creo que él ahora se está divirtiendo, está jugando".
También han hablado del cambio del jefe de la casa del rey, del relevo de Jaime Alfonsín, uno histórico, por Camilo Villarino o del adiós de Jaime Peñafiel al diario El Mundo. Pero una cuestión que también han abordado ha sido la que hace referencia al nuevo rey de Dinamarca, Federico. Recuerda Eyre que Letizia y Felipe fueron, por casualidades de la vida, a Copenhague cuando estalló todo en torno a la amistad especial entre el nuevo monarca danés y la actriz mexicana, ex de Cayetano Martínez de Irujo, Genoveva Casanova. Recuerda que cuando todo el mundo alucinó con la portada de Lecturas donde se les veía a los dos paseando por el parque del Retiro de Madrid, explicando que él ha dormido a veces en el pisito que tiene ella en la capital española. Y Letizia, que hizo todo lo posible por verla:
Una portada que dio la vuelta al mundo y que cogió a los reyes españoles allí, poniendo cara de circunstancias delante de los royals daneses. Eyre revela que cuando se enteró, "se comentó que la reina había ido a los corresponsales españoles y les había dicho: 'Por favor, pasadme la portada esta que tengo unas ganas locas de verla', porque Letizia es periodista, no lo olvidemos". La escritora lamenta que "nosotros, como lo supimos, lo comentamos y lo dijimos, y al cabo de tres o cuatro días (Zarzuela) emitieron un comunicado diciendo que esto no era verdad, que por cierto, sí era verdad. Si se desmiente una tontería como esta, ¿cómo no se va a desmentir o dar una explicación para frenar esta avalancha de informaciones negativas y bulos que afectan a Letizia?", se pregunta.
Quedémonos con las preguntas finales que hace: si la defiende mucha gente, muchos ciudadanos, "¿por qué no la defiende su marido y los suyos?", dice sobre Letizia y la Casa Real.