Aunque ya no están juntos, Corinna Larsen sigue condicionando la vida de Juan Carlos. Y es que después de la entrevista de su examante en OK Diario hace sólo diez días, el rey emérito habría decidido aplazar un retorno a España que entonces era inmediato. Según el mismo medio, tenía pasajes para volar desde de Abu Dabi el día 10 de octubre y poder celebrar el día de la Hispanidad en casa. Pero el miedo a las posibles consecuencias de la charla entre Eduardo Inda y Corinna le habría hecho cambiar los planes. Su vuelta no tiene ahora una fecha fijada.
El digital de Inda asegura, de fuentes próximas al exjefe del Estado, que Juan Carlos "se quedó acongojado" con las declaraciones de su amiga especial. Aunque no dijo nada que no se supiera. Corinna repitió que su ex tenía una máquina de contar billetes, señaló también el papel de Felipe en el entramado de su padre, explicó que los Borbones estaban enterados de las corruptelas de Iñaki Urdangarin y habló de las amenazas de muerte que ha recibido desde que se destapó la relación con el exmonarca. Pasajes que vivieron juntos entre los años 2004 y 2014, narrados por ella misma. Una vez vista la entrevista entera en vídeo y habiendo valorado las repercusiones que podía tener, el emérito habría considerado que no era adecuado regresar.
Pero todavía hay más. Según el mismo diario, Juan Carlos habría mantenido contacto fluido con sus amigos íntimos durante todo este tiempo, vía telefónica, y le habría encargado a uno de ellos que condicionara una mansión en Puerta de Hierro, una de las urbanizaciones más exclusivas de Madrid, para que él pudiera entrar a vivir. Es por eso que el exrey habría tenido previsto viajar a la capital española, ya que no parece dispuesto a vivir fuera de España a largo plazo.
La sombra de Corinna es alargada. Tanto que llega a los Emiratos Árabes. De momento, Juan Carlos no vuelve.