La reina Letizia es la mujer más poderosa de España. Una condición que supone un honor, mucha responsabilidad y una constante inmutable: cada gesto, cada aparición, cada imagen de la expresentadora de informativos convertida en consorte de Felipe VI es analizada, criticada y destripada a conciencia por los medios de comunicación y las redes sociales. Un buen ejemplo es lo que está pasando estos días con el viaje oficial de la Corona española a Suecia. La mayoría de medios se recrean con la instantáneas que llegan del país nórdico con una intención clara: alabar su estilo y su fondo de armario. Otros se han fijado en determinados complementos que no hacen nada de gracia, como llevar una estola de piel animal en el cuello. Era sintética, nos aclararon, pero se podría haber ahorrado un gesto innecesario y ofensivo con los animalistas.

Estas serían las últimas muestras, pero podríamos continuar la lista con fotografías de otras situaciones que explican sin palabras cómo es la reina de España. Una mala cara a la suegra o riñiendo a su hija, una mueca inquietante a los espectadores de los Premios Princesa de Asturias, un ademán agresivo de visita a Catalunya o incluso las imágenes que demuestran una de sus pasiones y obsesiones: estar en forma hasta el extremo que muchos le llaman vigoréxica. Ahora bien, seguro que nunca la habíamos visto como en una muestra que se puede visitar en Los Alcázares, en Murcia. De hecho nunca nos la querríamos imaginar de esta manera.

Las fotografías de la reina Letizia siempre dan mucho juego / GTRES

El artista italiano AlesXsandro Palombo es el autor de una campaña de sensibilización a favor de las víctimas de violencia de género, dentro del marco del Día Mundial de la Eliminación de esta lacra que sufren millones de mujeres por todo el mundo, muchas de ellas con consecuencias trágicas: los hombres las asesinan. Y las que no mueren quedan traumatizadas durante toda su vida, víctimas de violencia física, psíquica, verbal, vicaria, etcétera. Los hematomas en la cara y en el cuerpo se pueden marchar después de un tiempo, pero las cicatrices interiores se quedan para siempre. Pues bien, Palombo tiene una técnica particular para hacer llegar su mensaje al mundo: manipular retratos de gente muy famosa después de haber sufrido una de tantas palizas que recibe este colectivo.

Bajo el lema "Ella lo denunció, pero la mataron de todos modos" encontramos la impactante fotografía de una Letizia con un ojo morado y el otro inflamado, llena de rasguños y contusiones y con el labio partido. El texto continúa: "Nadie le creyó. Se quedó sola. Pero no estaba protegida. Pero él no fue detenido. Pero la mataron de todos modos". El artista nos propone un escenario que parece utópico, que la reina sea maltratada por su marido. Tan utópico como lo veía la enorme mayoría de víctimas de estos episodios violentos, aberrantes y delictivos: todas ellas nunca se hubieran imaginado que quien se suponía su compañero de vida acabaría destrozándolas. Parece atrevido, pero ninguna mujer está excluida de sufrir estas barbaridades. Y este es el gran drama de nuestra sociedad.

Letizia maltratada en una campaña de concienciación / Alesxksandro Palombo

La reina Letizia en su despacho / @casareal

La fotografía ha levantado polvareda: hay quien considera la monarquía como algo intocable, y más aún en esta tesitura. Pero que nadie olvide que, antes que reina, también es una mujer. Con todo lo que esto significa.