Domingo de Resurrección del año 2018. La Catedral de Palma es el escenario del momento más bochornoso que ha protagonizado nunca la reina de España: la bronca con su suegra, impidiendo que se pudiera hacer una foto con sus nietas. Por más tiempo que pase, nunca nadie olvidará la imagen de Letizia abalanzándose sobre Sofía. Las dos lo saben e intentan, como sea, enterrar la polémica. Pero no lo consiguen. Se hacen fotos juntas, salen a pasear... y todo resulta en vano. El último intento de hacer creer a los ciudadanos que su relación es excelente, una salida al cine con las dos niñas.
La madre y la abuela han llevado a Leonor y Sofía a ver 'El rey león'. Hasta aquí todo normal, si no fuera porque la reina emérita ya fue hace unos días con sus otras nietas. O bien le encantó el filme, que es muy monárquico, y quería repetir (visto así, tendría cierta lógica) o todo es un papelón para que los fotógrafos la retraten con Letizia y hacer ver que ya son amigas. Una tesis que comparte la cronista real Pilar Eyre, que interpreta la escena como un intento desesperado de “intentar borrar de nuestras retines lo de Palma y el rumor de que no las ve nunca” (a las niñas).
Dado que el otro día vio la misma película con sus otras nietas, solo cabe interpretar este nuevo visionado por la necesidad desesperada de hacerse estas fotos con las hijas de Letizia e intentar borrar de nuestras retinas lo de Palma y el rumor de que no las ve nunca. https://t.co/GHe9zeFbLo
— Pilar Eyre (@pilareyre) Augusto 2, 2019
Si se han tirado o no las palomitas por encima, es un misterio porque dentro de la sala no se puede gravar con vídeo. Lo mejor que pueden hacer Letizia y Sofía para disipar las dudas sobre su mala relación es seguir la doctrina de la película, "hakuna matata": vive y sé feliz.