Un hombre lleno de conflictos internos después de que su prometida, en lugar de casarse con él, se case con otro, en este caso, su padre. No es la película de Pedro Sánchez y el amor fallido con Pablo Iglesias. Es la historia del príncipe Carlos que en el siglo XVI vio cómo Isabel de Valois se casaba con el rey Felipe II. Es la historia de una de las óperas más famosas de Verdi, Don Carlo. Y es el plan del miércoles por la noche que los reyes de España escogieron el día que el país donde reinan se asoma a unas nuevas y vergonzosas elecciones generales.
Efe
Fíjense en esta imagen. El rey Felipe saluda al público del Teatro Real en la apertura de la temporada operística. La famosa pieza del compositor italiano se volvía a representar después de catorce años, con Ainhoa Arteta en el reparto. El monarca, con la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, a su derecha, de rojo, y su mujer Letizia a la izquierda, con un vestido blanco de Lola Li. Y cara de pocos amigos... En ella ya es habitual. ¿Pero qué le hacía tener este rictus? Vanitatis tiene la respuesta. Presten atención a su mano izquierda. Está aguantando el vestido. Y es que la pieza que escogió le dio la lata durante todo el acto. Se le abría más de lo que hubiera deseado.
Europa Press
En el siguiente vídeo se vuelve a ver a la reina como, instantes antes de la representación, justo cuando sonaba el himno español, se coge el vestido con cara de pocos amigos y le hace una señal a alguien del equipo que la acompaña y que está en la platea. Después del himno, se vuelve a sentar reproduciendo el gesto a la espera de que le llevaran lo que había pedido: dos imperdibles por evitar que el Lola Li dejara ver más de la cuenta.
Letizia consiguió evitar que el vestido se soltara. Tampoco se la vio a ella muy suelta. En el coctail para las autoridades se limitó a pedir agua. No así el rey Felipe, que iba fuerte y pidió una cervecita. En el acto, aparte de los Borbones, también estuvieron el ministro Borrell, Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa, Isabel Díaz Ayuso, Alberto Ruiz-Gallardón o Carmen Lomana.