La reina Sofía llegó a Palma de Mallorca el pasado jueves en compañía de su hermana Irene de Grecia. La emérita cumple con las tradiciones y estará presente en la Misa de Pascua. A lo largo de la semana disfruta de otros eventos celebrados en la isla balear. Este lunes ha asistido el concierto anual de Pascua a beneficio de Projecte Home Balears, que ofrece tratamientos para que las personas drogodependientes puedan vivir una vida libre de adicciones.La actuación ha sido interpretada por la Orquesta Sinfónica Illes Balears, dirigida por Pablo Mielgo, y la Coral Universitat de les Illes, diriga por Joan Company, con 90 cantantes, que han interpretado 'Un réquiem alemán', de Johannes Brahms.
La emérita cumple con sus obligaciones. Ella es la imagen de muchas de las tradiciones de los Borbones. Con su presencia deja en evidencia el compromiso de Casa Real con Palma de Mallorca. Precisamente, fue el gobierno de la isla balear el que regaló el palacio de Marivent a los reyes para fomentar el turismo y les corresponden viajando con asiduidad a Palma. Para Sofía es como su segunda casa.
Una vez más la reina Sofía reapareció su famoso anillo de pedida, que se quita y se pone según conveniencia. Tal vez con esta estrategia quiere mandar algún recado a alguien. Se trata de un aro de oro en el que destacan dos rubíes unidos por un diamante y que el emérito le regaló el 12 de septiembre de 1961 cuando le propuso matrimonio en el hotel Beau Rivage de Lausanne.
La indirecta que envía la reina Sofía con su anillo de compromiso
Según los expertos en Casa Real, Sofía se pone el anillo en apoyo a Juan Carlos. Parece funcionar como una especie de termómetro sentimental en el matrimonio. Cuando el emérito estuvo envuelto en polémicas con su amante, se lo quitó, pero se lo volvió a poner cuando se habló de un acercamiento.
Cuando el emérito se exilió en Abu Dabi, Sofía volvió a quitarse el anillo. "Doña Sofía mantuvo el contacto con su esposo, con el que habla frecuentemente por videoconferencia, incluso cuando la relación de Don Felipe con su padre estaba rota. Le hubiera encantado viajar a Emiratos a visitarle como hacen sus hijas y nietos e incluso ir a Sanxenxo en mayo a recibirle, pero ha sacrificado cualquier gesto de apoyo público a su marido para evitar polémicas que dañen a su hijo y a la Corona, que son su máxima prioridad”.
Podría haberse vuelto a poner el anillo para dejarle claro a Marta Gayá que ella sigue siendo la mujer del emérito, y por tanto la emérita. Es la única amante de Juan Carlos a la que no pudo hacerle frente. El entonces rey estaba muy enamorado y ejerció el poder suficiente para frenar a su esposa. Se dice que la mallorquina podría pasar temporadas con el padre de Felipe VI en Abu Dabi.