La reina Sofía ha afrontado los años más complicados de su vida. En tan solo dos años es como si hubiese perdido a sus dos hermanos. Constantino de Grecia falleció a causa de un derrame cerebral en enero de 2023, justo unos meses más tarde se confirmó uno de los mayores secretos de Zarzuela, Irene de Grecia padece Alzheimer, la enfermedad del olvido. En su caso está muy avanzada y ya no recuerda absolutamente a nadie. En las últimas apariciones se la ha podido ver en silla de ruedas, con el rostro demacrado y la mirada completamente perdida. La emérita está triste porque se ha quedado sin sus dos hermanos, y le duele ver a su hermana que ni tan siquiera la reconoce. Ya no es la misma de antes.
La madre de Felipe VI se ha encerrado en su más absoluta tristeza. No pasa por su mejor momento. Sus hijos están preocupados porque la ven demasiado triste, ni tan siquiera sale de casa, son ellos los que se encargan de animarla con algunos planes con sus nietos. Por ejemplo, la infanta Cristina se la suele llevar a ver partidos de balonmano de Pablo Urdangarin, mientras que el monarca le pone compromisos en su agenda para que esté entretenida, ya que para ella, la corona es muy importante. Si le quitasen su labor al frente de la institución acabarían con ella para siempre.
La reina Sofía regala sus joyas a sus nietas y sus dos hijas
En los últimos meses, la reina Sofía también ha preocupado a sus hijos por problemas de movilidad y algún que otro despiste, pero en su caso fruto de su avanzada edad, ya son 86 años y a finales de este año celebrará los 87. La emérita sabe que su final está cada vez más cerca y ya tiene todo preparado para su partida. De hecho, algunas de sus joyas ya las habría regalado en vida a sus hijas, a sus nietas y a la reina Letizia.
La reina Sofía dispone de un amplio joyero, algunas de ellas pertenecen a su tiempo de monarca, mientras que otras son heredadas de su familia, como la tiara Prusiana. Una corona que llevó Letizia en su boda, y que pertenecerá al joyero real para que Leonor pueda usarla el día de su boda. También dispondrá de otras joyas como la Cartier o la rusa.
Una de las infantas recibirá el collar con un rubí que le regaló su madre, la reina Federica. Los rumores apuntan a que lo mismo sucederá con el conjunto de rubíes que el armador griego Niarchos le regaló por su boda, y que es de su entera propiedad. La parure incluye tiara, collar y pendientes.
Irene Urdangarin ya lució uno de los pendientes de la reina Sofía en la boda de Teodora de Grecia. A la joven ya se la vio con algunas otras joyas. Victoria Federica también dispondría de algunas de estas joyas de la colección.
Y aunque las infantas ya han recibido algunas de las joyas de su madre, por ahora prefieren lucir las suyas propias.