La vida de la reina Sofía no ha sido un camino de rosas. Ha vivido siempre en la sombra, humillada y traicionada por Juan Carlos, un hombre al que nunca quiso, aunque ella por lo menos hizo el intento. Para ella lo más importante era la familia, y estaba dispuesta a formarla con el emérito. Sin embargo, él no pensaba igual. Estaba dolido porque Juan de Borbón había roto su relación con Olghina de Robilant, su gran amor, una plebeya, periodista y escritora, como Letizia, tal vez por ello el exmonarca nunca quiso que Felipe VI fuese feliz con la madre de Leonor y Sofía, se veía muy reflejado en él. A él le obligaron a casarse con una mujer de la realeza para juntar dos monarquías. Hay que decir que la emérita tampoco estuvo nunca enamorada de Juan Carlos, sino de Harald de Noruega, pero éste siempre la vio como una buena amiga y nada más.

reina sofia cabizbaja
reina sofia cabizbaja

Por muchos intentos que hizo, la reina Sofía siempre recibió la negativa de Juan Carlos. El emérito solo tuvo relaciones íntimas con la emérita para dar a luz al varón que heredaría el trono en el futuro, pero parecía que les habían echado un mal de ojo y tardaba en llegar. La relación entre ellos estaba rota. Juan Carlos se veía con otras mujeres, tenía una mujer en cada ciudad, la mayoría de ellas eran prostitutas de lujo que él mismo encargaba y pagaba con los Presupuestos Generales del Estado.

La reina Sofía e Irene de Grecia, siempre juntas 

Por suerte, la reina Sofía no estaba sola, encontró su máximo apoyo en su hermana, Irene de Grecia, un pilar muy importante para ella. La emérita encontró una soledad enorme en casa, pero la famosa tía Pecu la llenaba por completo. Juntas compartían su día a día, ya que la madre de Felipe se instaló en otro ala de Zarzuela para no cruzarse con Juan Carlos. Una vez que nació el entonces príncipe cesaron la convivencia.

La reina Sofía e Irene de Grecia duermen en la misma habitación desde hace cuarenta años, han compartido cama. A día de hoy, las dos duermen en habitaciones separadas pero en la misma zona. El recinto privado de El Pardo. Cuando Irene decidió irse a vivir a España con su hermana, no había una zona para ella. Se tuvo que adaptar. Se reformó la zona en la que se encontraban los vestuarios de la piscina. “Vine aquí cuando murió Franco para cinco días y ya llevo 40 años”, bromeó. Es un espacio que cuenta con dos habitaciones, una para cada una, y un despacho. Comparten el comedor y en los inicios compartieron la misma habitación, y la misma cama. 

Desde que está tan delicada de salud, la reina Sofía no se separa de Irene de Grecia, se la lleva a todos sus compromisos institucionales. En breve viajarán a Marivent y se quedarán allí todo el verano.

reina Sofía
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