Se acercan importantes cambios en la corona. La reina Sofía se encuentra en Marivent, donde se queda hasta finales de septiembre si las condiciones climatológicas lo permiten. En Palma de Mallorca ha encontrado la paz y tranquilidad que busca, alejada del ambiente burocrático de Zarzuela. No le importaría vivir en la isla balear para siempre. Su mejor compañía y apoyo es su hermana Irene de Grecia, siempre fiel. Estas semanas han sido especialmente difíciles por la negativa de Letizia a reunir a todos sus nietos. No lo ha pasado bien mientras ha estado ella, pero a mitad de agosto tampoco ha recibido la visita de sus dos hijas y el resto de nietos.
Sofía siempre se ha visto como una persona alejada de la familia. Nunca se ha contado con ella para tomar decisiones. Se ha mantenido en su papel de reina consorte y lo hará hasta el fin de sus días. Aunque siempre ha tenido que soportar humillaciones públicas por parte de Juan Carlos, y ahora por parte de Letizia y su propio hijo, Felipe.
La reina Sofía es la única que Felipe mantuvo en los Presupuestos Generales del Estado cuando decidió eliminar a toda la familia por el caso Nóos. También es la única que hasta la fecha mantiene sus funciones institucionales. Normalmente, ella se encargada de los actos religiosos y solidarios, también realizaba los viajes internacionales para que Letizia no se separase tanto tiempo de sus hijas, pero desde este 2023, con la marcha de Leonor y Sofía, es la actual reina la que ha tomado el relevo.
La decisión más dura de la reina Sofía
Ahora mismo la figura de Sofía es menor. Carece de importancia. Letizia le ha quitado los viajes internacionales porque ahora ella tiene más tiempo y la emérita es demasiado mayor. Los reyes han hablado con la exmonarca y creen que lo mejor es que disfrute de sus últimos años de vida y descanse. Es probable que se le haga un homenaje a su gran labor en estas más de cuatro décadas al servicio de la corona.
Llegan cambios a la corona, y es que pronto Leonor cumplirá la mayoría de edad, el 31 de octubre, y jurará la Constitución ante el rey. A partir de ese momento tendrá muchas más responsabilidades. Y es probable que se incluya en los Presupuestos Generales del Estado. A día de hoy ninguna de las hijas de Felipe cobran un sueldo. La princesa de Asturias y la infanta Sofía se encargarán de pequeños actos institucionales, pero sus apariciones serán cada vez mayores. Mientras que la emérita se quedará sin obligaciones dentro de la institución.
La reina Sofía acepta la decisión de Felipe, y aunque siente un profundo dolor, cree que ha llegado el momento de despedirse de la institución.