La reina Sofía ha afrontado meses muy complicados. Su salud estaba muy mermada con los últimos acontecimientos. El pasado mes de mayo la emérita se reunió con sus tres hijos y les pidió realizar un almuerzo con sus ocho nietos. Su mayor sueño es reunir a toda la familia al completo como antaño antes de su fallecimiento. Sabe que es muy mayor y no quiere marcharse sabiendo que su familia está totalmente rota. Ella es una persona muy tradicional y familiar, y siempre ha luchado por los suyos. En aquel momento no consiguió su propósito. Mientras Elena y Cristina aceptaron esa reunión en Marivent, Felipe se lo tuvo que consultar a Letizia y ésta se negó en rotundo. No quería que nada ni nadie perjudicase a la imagen de Leonor y Sofía, tal vez por ello tampoco han ido esta semana al cumpleaños de la infanta Elena. En las últimas reuniones familiares, a Sofía siempre le ha faltado alguien. En la graduación de Irene Urdangarin, los reyes y sus hijas, en el cumpleaños de Leonor, Victoria Federica, Juan y Pablo Urdangarin, y en el aniversario de su hija mayor, la princesa y la infanta.
Sofía de Grecia también está muy preocupada con la salud de Irene de Grecia, quien ha presentado un importante deterioro en los últimos meses. Ha sido su principal apoyo y ahora mismo no quiere separarse de su lado. También se la pudo ver en el cumpleaños de la infanta Elena.
La reina Sofía consigue su sueño gracias a la infanta Elena
La emérita reaparecía muy feliz en el cumpleaños de su hija mayor, al lado de la infanta Cristina. Saludaba y sonreía a las cámaras presentes a las puertas del restaurante. Nuevamente se reencontraba con toda su familia, a excepción de Leonor y Sofía. Mostró una imagen muy diferente a sus últimas apariciones en actos institucionales donde rompió a llorar.
Sin embargo, la presencia de la reina Sofía enturbió la de Juan Carlos I. Ambos exmonarcas demostraron que su matrimonio está totalmente roto desde hace décadas. Aunque nunca han anunciado su divorcio, siempre han vivido separados. Nunca se quisieron y menos cuando la madre de Felipe descubrió la traición de su marido con las miles de infidelidades en su matrimonio.
La reina Sofía no tiene ningún cariño hacia Juan Carlos, solo es el padre de sus hijos, lo demás ya es pasado. No tienen ninguna relación y si puede evitar verle, mejor. Se sentaron separados y ni tan siquiera hablaron ni un solo minuto, ni se saludaron, tampoco le despidió. Llegaron por separado y se fueron de la misma forma.