El debate sobre si los familiares pueden conducir a celebridades con Alzheimner a un acto público para dar apoyo a una causa lo abrió el president Pasqual Maragall. Algunos le atribuían afinidad con el independentismo, como su hermano Ernest Maragall, mientras otros, como el alcalde Jaume Collboni, lo asocian al PSC aunque el partido lo echó de la Generalitat para poner a José Montilla de candidato. A todo el mundo le chirría, o le parece como mínimo cuestionable que si un VIP ya no puede valerse por él mismo sea utilizado en público ni siquiera por su familia. Sofía de Grecia, reina emérita de España y casada con Juan Carlos para mantener el estatus, todavía forma parte de la agenda de Casa Real y cobra del erario público, aparte de vivir a cuerpo de reina en Zarzauela con su hermana Irene, que no tiene ningún vínculo con España más allá de lo evidente: el Estado le paga la senectud. Lo que ya parece un exceso es conducir a Irene a una alfombra roja de premios que preside la reina de 85 años. Acaba de pasar, días después de publicarse que tía Pecu tiene la enfermedad del olvido.
Zarzuela advierte la posible presencia de tía Pecu, la hermana enferma: "La ceremonia de entrega del 38º Premio BMW de Pintura contará con un concierto a beneficio de la Fundación Mundo en Armonía, presidida por Su Alteza Real la Princesa Irene de Grecia. La totalidad de los fondos recaudados este año se destinará a paliar las secuelas del terremoto de Marruecos". Una buena causa pero una Fundación que tiene una presidenta de honor que ya no se vale por ella. Si quieren llevarla a la alfombra de los premios de unos coches de lujo, BMW, al lado de celebrities como Andrés Velencoso o Candela Serrat, hija de Joan Manuel Serrat, es como mínimo extraño.
Velencoso, Serrat, Sandra Barneda, tía Pecu... no queda demasiado fino mezclar famosos y royals con demencia. La primera que hizo público que la tía de su marido no estaba bien, sosteniéndola en una salida mallorquina el verano pasado, fue Letizia. Aquella fue la primera señal que puso la prensa en alerta: el gesto inusual quería anunciar que Sofía tenía una hermana con Alzhéimer y que Casa Real asumía el coste de cuidar. El servicio de Zarzuela no ha notado mucho la diferencia, hace años que tía Pecu vive del erario público español. Irene está arruinada ya que, según Hola, dio toda su herencia a esta ONG, Mundo en Armonía, que esta noche del lunes otorgaba los premios de pintura. Hace años que Pecu vive del Presupuesto de Casa Real: "Fue en los años ochenta cuando llegó a la capital. No entraba en sus planes, pero, tras vivir junto a su madre, la reina Federica, en la India, “vine a Madrid para pasar cinco días y me quedé cinco años. Y según pasaba el tiempo entendí que mi lugar estaba al lado de Sofía”. Como siamesas. Caiga quien caiga.