La reina Sofía ha recibido una gran alegría al compartir el fin de semana con su familia en Grecia. Han sido años muy complicados donde casi todo han sido malas noticias, las únicas alegrías han sido las últimas bodas en la familia. Precisamente, a Irene de Grecia solo se la ha visto de boda en boda y tira porque te toca. La conocida tía Pecu reapareció hace unos meses en silla de ruedas, con la mirada perdida y el rostro muy desmejorado. Parecía que no iba a estar presente en la boda del príncipe Nicolás de Grecia por los avances de su enfermedad, pero finalmente apareció por sorpresa acompañada por la reina Sofía, su fiel compañera de viaje, y la infanta Cristina.
En esta ocasión, Irene de Grecia apareció con un nuevo aire. Después de las críticas y las noticias recibidas, Casa Real aprovechó la ocasión para zanjar todos los rumores al respecto. Obligaron a maquillar a la hermana de la reina Sofía de tal manera que pareciese que tiene un buen aspecto. También la vistieron de gala y la peinaron. Sin duda el cambio es más que evidente, aunque en todo momento estuvo muy seria y totalmente desconectada de la situación.
Casa Real solo intentó ocultar la verdad para zanjar todos los rumores. Están siendo unos años muy complicados para la corona, especialmente para Felipe VI, Cristina y Elena. En estos últimos meses los tres hermanos han aparcado sus diferencias para hablar seriamente del futuro de sus progenitores, y también de Irene de Grecia, que al fin y al cabo ha sido como una segunda madre para ellos.
Casa Real oculta el verdadero estado de salud de Irene de Grecia con maquillaje
Los tres son octogenarios y empiezan a tener problemas típicos de su avanzada edad. En el caso de Irene y Sofía aún es más fácil porque están viviendo en Zarzuela, pero Juan Carlos I se encuentra en el exilio en Abu Dabi.
La reina Sofía es quien vive al lado de Irene de Grecia, y es quien más conoce su estado de salud. La conocida tía Pecu padece Alzheimer, tal y como se comunicó hace dos años. La enfermedad está avanzando a pasos agigantados y prácticamente ya no recuerda a nadie, aún tiene un momento de lucidez, pero poco más.
Esta enfermedad no tiene cura y solo puede empeorar. Felipe VI ya puso a disposición de Irene de Grecia los mejores neurólogos y cuenta con enfermeros las 24 horas del día que se encargan de todos sus cuidados.
La reina Sofía se ha quedado sola tras el fallecimiento de Constantino de Grecia y la enfermedad de Irene, es como si hubiese perdido a sus dos hermanos.