La reina Sofía atraviesa uno de sus peores veranos en Palma de Mallorca. Cada vez más sola. Su único apoyo, como siempre, es Irene de Grecia. La emérita deseaba reunir a toda la familia un solo día, quería ver a sus ocho nietos juntos, como hace más de una década. Sabe que su edad es avanzada, y aunque no tiene ningún problema de salud, le quedan pocos veranos para disfrutar de Marivent, un lugar donde ha encontrado paz y tranquilidad alejada del ambiente burocrático que se respira en Zarzuela.
Las infantas Elena y Cristina se mostraron dispuestas a reunirse todos, de hecho compraron los billetes de avión y alquilaron dos coches para sus hijos, ya que ellos no disponen de escoltas. Faltaba la decisión de Felipe, pero este tenía que comunicárselo a Letizia. Lógicamente, ella dijo “no”. No iba a consentir que Leonor y Sofía se viesen las caras con sus primos, y mucho menos con Victoria Federica y Froilán, quiénes cree que son dos malas influencias.
![reina Sofía de Nueva York a Grecia efe reina Sofía de Nueva York a Grecia efe](/uploads/s1/43/31/26/26/reina-sofi-a-de-nueva-york-a-grecia-efe.jpeg)
Los reyes tuvieron que retrasar sus vacaciones por los compromisos institucionales y el adelanto de las elecciones. Además, a partir del 17 de agosto, con el ingreso de Leonor en la Academia Militar General de Zaragoza, debían retomar sus agendas. Solo tuvieron dos semanas de vacaciones, a principios de agosto, y tuvieron que pasarlas en Palma de Mallorca con la reina Sofía. Como suele suceder siempre, las infantas y sus hijos no pueden acceder a la isla balear ni a Marivent mientras estén ellos.
La familia de la reina Sofía totalmente rota para siempre
Las infantas hicieron otros planes y dejaron de lado a Sofía. Algunos de sus nietos ya no han podido visitarla porque han retomado sus compromisos profesionales, como Pablo, Juan o Froilán. Elena pasó unos días con Juan Carlos en Sanxenxo, unas imágenes que molestaron a Felipe y Letizia.
![familia real en Marivent familia real en Marivent](/uploads/s1/43/31/26/62/familia-real-en-marivent.jpeg)
La reina Sofía está totalmente rota por la situación familiar. Ella es una persona muy religiosa y familiar y le duele que sus hijos estén enemistados. Elena y Felipe hace tiempo que ni se hablan. En estos últimos años, la hija mayor de los eméritos ha discutido en varias ocasiones con su hermano por las humillaciones públicas a las que somete constantemente a sus padres.
El último sueño de la emérita es que todo se pudiese arreglar y la familia aparcase sus diferencias. Necesita verles unido y poder disfrutar de todos sus nietos, aunque sea en el ámbito privado, por lo menos mientras ella esté viva.