La monarquía española tiene un fallo muy gordo: no da entrevistas. Ni Felipe VI ni Letizia ni los eméritos se ponen delante de las cámaras y de los micros. Es algo que no favorece a la monarquía: pues la gente los ve como meras instituciones (que es lo que son), pero sin cercanía alguna con el pueblo. Letizia sabe de sobras hablar -fue reportera de Informe Semanal y presentadora del telediario de TVE en sus tiempos mozos- y Don Felipe, tres cuartos de lo mismo. Ambos tienen don de gentes, de eso no hay duda. Es su gran tarea pendiente, algo que sí hacen, por ejemplo, otros royals de Europa.
Este es el caso de Harry y Meghan de la Royal Family, de Marta Luisa de Noruega (la futura esposa del chamán Durek Verrett) o de... ¡Guillermo Alejandro! Y es que el rey de los Países Bajos ha demostrado que no le tiene miedo alguno a ponerse ante el foco mediático. El marido de Máxima de Holanda no dudó en dar el "sí" cuando le propusieron 'A través de los ojos del rey', un documental en formato podcast en el que sería entrevistado por uno de los presentadores de referencia de su país, Edwin Evers. Con un total de 10 episodios de unos 20 minutos cada uno y grabado desde el Palacio Real de Huis ten Bosch -su residencia oficial-, Guillermo Alejandro ha hecho un minucioso repaso de su primera década al frente del Reino de Los Países Bajos. En este, ha dado un repaso único de toda su trayectoria analizando los momentos clave. Los repasamos:
Su encuentro con Putin
Uno de los momentos más duros que ha repasado en sus primeros capítulos (no se han emitido todos aún) es el encuentro que tuvo Guillermo Alejandro con Vladimir Putin. El dictador ruso despahó con el jefe de la Casa Real neerlandesa pocos días antes de la invasión de Crimea, algo que no hubiese hecho, seguramente, de saber con anterioridad la invasión rusa. "Si lo hubiera sabido, habría sido diferente", subraya en 'A través de los ojos del rey' tras explicar brevemente el contenido de la charla con Putin, que tuvo lugar en los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi. Ahora, por supuesto, ni se ven ni se hablan: Holanda está por la paz mundial.
Su historia de amor con Máxima
Cupido llegó a la vida de Máxima y Guillermo Alejandro en 1999 y aún no se ha ido. Ni se irá... Y es que el enamoramiento de los mandamases neerlandeses tuvo lugar en un sitio muy especial para ambos, la Feria de Abril de Sevilla. Máxima es de apellido Zorreguieta, por lo que es nativa de Buenos Aires (Argentina) y, como todas las latinas, es súper espontánea y natural, algo que ha contagiado a su esposo. Ha sido William Alexander, precisamente, el que se ha deshecho en elogios hacia ella en este documental-podcast que ya es vox populi en Holanda: "Creo que tengo suerte de vivir en el siglo XXI, donde mostrar emociones no se ve con la misma debilidad que en el pasado. No me avergüenzo de eso. También tengo eso con una mujer latina, que, por supuesto, puede ser muy emocional. Eso lo compartimos: es muy natural y empática". Larga vida a la monarquía holandesa.