El rey Juan Carlos vuelve a protagonizar una nueva polémica. Las filtraciones de los audios de Corinna en los que confiesa irregularidades ante el comisario Villarejo han sacudido a la monarquía. Primero dolió cuando dejó entrever que el monarca habría participado en tramas corruptas y que podría estar detrás del encarcelamiento de Iñaki Urdangarin. Pero aquí no ha acabado la cosa.
La última información vuelve a poner el foco en él, ya que un embajador español habría acompañado a Corinna a una reunión en Arabia Saudí para negociar con un príncipe en nombre del Rey. Un negocio que habría acabado con 14 empresas españolas perdiendo 21 millones de euros. Eso sí, por mucho revuelo que lo rodee, Juan Carlos sigue a la suya.
Después del estallido de la polémica, Juan Carlos se escondió con objetivo de no dar la cara. Nadie lo veía, aunque se decía que estaba con los amigos en Sanxenxo. Pues bien, las cámaras por fin le han pillado... pero fuera de España.
El verano lo ha pasado recluido, pero empieza el curso y parece que no quiere renunciar a seguir disfrutando del mar. En este sentido, este miércoles ha participado en el campeonato de Europa de los barcos de seis metros. Se encuentra en una pequeña localidad francesa con el resto del equipo, con los que se ha puesto al frente del barco Bribón Movistar.
Pero no sólo han participado, sino que han conseguido posicionarse como líderes. A estas alturas posiciona como preferido para llevarse el título continental. El director del equipo se ha mostrado exultante: "Hemos conseguido llegar a la primera posición gracias a las prestaciones del barco en estas condiciones y a la tripulación, que no ha cometido ningún error".
Si todo va bien, esta tarde ganarán la competición. Una buena manera de olvidar los problemas que rodean a la familia real...