Juan Carlos I sigue de vacaciones en Sanxenxo (Galicia) al lado de un grupo de amigos. El rey emérito está disfrutando de unos días con la vela y la gastronomía como protagonistas.

Sus restaurantes preferidos tienen el marisco como plato destacado, pero también sería aficionado a otras comidas típicas gallegas, según Vanitatis: con la empanada de maíz y zamburiñas, pimiento de Padrón, filete empanado, patatas fritas, merluza, tortilla y flan de queso.

Sin embargo, aseguran que la debilidad gastronómica del Rey son los percebes, las nécoras y el txangurro con vino albariño. De hecho, este mismo mes fue de viaje con su hija Elena y sus nietos al País Vasco, donde les pillaron atiborrándose de marisco.

Pero no sólo pasa el tiempo llenando la barriga, sino que también ha participado en la Regata Das Illas Atlánticas, de barcos clásicos. Una afición que comparte con su hijo, el rey Felipe; quien sí que ha estado en Mallorca con el resto de la familia en los tradicionales días veraniegos en la isla.

Juan Carlos I sigue sin poner un pie en Marivent, disfrutando de las vacaciones a solas.