El supuesto amorío del príncipe Guillermo y Rose Hanbury ha resonado en los medios desde hace mucho, de hecho, se ha dado a conocer que posiblemente la mujer se acostaba con el royal mientras Kate Middleton estaba embarazada.
El amorío del príncipe Guillermo y Rose Hanbury
Tal como indica ABC, a la marquesa de Cholmondeley se la considera como una gran seductora, que siempre ha llamado la atención. A la exmodelo nunca le faltaron pretendientes, incluso se llegó a rumorear que entre ellos estuvo el príncipe Guillermo, aunque finalmente Rose se decantó por contraer matrimonio con David Rocksavage. Para el año 2019, unas imágenes en las que aparecía el actual príncipe de Gales en una fiesta acompañado de Rose Hanbury, impactaron al mundo, pues hay que recordar que en aquel momento, ella era una de las mejores amigas Kate Middleton, quien estaba embarazada de su tercer hijo con el heredero.
Según lo reseñado por algunos medios, Kate, furiosa, le pidió a Guillermo eliminar a la marquesa de Cholmondeley de su círculo de amigos. El resto del grupo también dejó de lado a Rose Hanbury, ya no solo por el escándalo con el nieto de la reina Isabel II, sino por todos los anteriores. De igual forma, hay quienes indican que la princesa de Gales prohibió que la supuesta amante de su esposo volviera a asistir a eventos de la realeza, algo que ha sido imposible de evitar. Muestra de ello fue su aparición en la coronación del Carlos III. David Cholmondeley, el esposo de la exmodelo, era ascendido a Lord-in-Waiting, cargo similar al de una dama de compañía del rey tras el fallecimiento de la reina Isabel II. Cargo que conlleva varias funciones que lo ponen en la primera línea de la monarquía británica y, automáticamente, acerca a Rose Hanbury a la corona.
Rose Hanbury en la coronación de Carlos III
Además del príncipe Harry, las miradas también estuvieron centradas en Rose Hanbury, pues muchos esperaban no verla en el lugar, sin embargo, sorprendió cuando se dejó ver con un look que contenía un mensaje para Kate Middleton. La mujer llegó acompañada de su marido, David Cholmondeley, discretamente, dispuesta a ser partícipe de un día histórico en Inglaterra y también para ver a su hijo, Oliver, ejercer de paje real en la ceremonia. Llevaba un sencillo vestido blanco con falda plisada de largo midi y lazo al cuello. Lo original del diseño eran las bandas negras que tenía en las mangas ligeramente abullonadas. Sobria y muy estilosa, así como la describe El Español en su página web. Sin embargo, hubo un detalle que pasó inadvertido para muchos pero que tenía mucho que ver con Kate Middleton. Los zapatos que llevaba también forman parte del armario de la Princesa de Gales.
Son de la firma italiana Aquazzura y su precio es de 675 euros. Podría ser una coincidencia más, pero cabe destacar que Kate los había lucido solo un día antes de la coronación en un acto oficial con un vestido también en blanco y negro. Así pues, ambos estilismos eran gemelos. El hecho de que la marquesa de Cholmondeley hubiera elegido precisamente este diseño y no otro se ha interpretado como un mensaje velado a la nuera de Carlos III.