Una cosa es Familia Real y otra Familia del Rey. En el primer grupo sólo están Felipe, Letizia, Juan Carlos, Sofía, la princesa Leonor y la infanta Sofía. Seis personas. En el segundo grupo está el resto: desde Urdangarín en Telma Ortiz, de Froilán al Conde Lequio. Se han publicado perfiles más o menos hagiográficos del primer grupo, y quien ha ido más lejos en revelar cómo es la reina Letizia ha sido su primo David Rocasolano. Su libro Adiós Princesa, un ejemplar de 2013 descatalogado y difícil de encontrar, es el manual de todo lo que Letizia no quiere que se sepa de ella. En Blau ha desgranado qué revela: que Letizia abortó un año antes de comprometerse con el príncipe o que tuvo que firmar unos capítulos matrimoniales donde renuncia a la custodia de las niñas en caso de divorcio. Queda el retrato final que le hace su primo carnal. ¿Cómo es de verdad Letizia?
Poco culta: "La prensa lacaya dice que mi prima es lectora voraz pero jamás lee más que los periódicos y algún best seller tipo Grisham. Sobre la actualidad se limita a decir que todos los políticos viven del cuento. Antes también lo decía de la Casa Real pero obviamente ya no"
Paranoica: El primo hacía fotos de su hija menor cuando iban de visita a Zarzuela y un día Letizia le suelta:"No hagas fotos aquí. Pueden interesar a mucha gente. No estoy paranoica. Te pueden robar la cámara". David Rocasolano es el autor de las fotos de Felipe y Letizia en triciclo que publicó en su perfil.
Desconfiada: Letizia sospechaba que alguien de la familia filtraba información a la prensa y un día durante el primer embarazo los reúne y les dice: "Será niño y se llamará Pelayo". Una mentira que acabó publicada en los diarios. Sirvió para comprobar que, en efecto, en la familia había un topo.
Cínica: El primo publica tres documentos de la clínica donde Letizia abortó un hijo que no quería de una relación anterior a Felipe. En una conversación con amigos del rey, Letizia emite esta opinión sobre el aborto: "Creo que un ser, cualquier ser que te mande Dios, debe ser respetado. Si a mí mañana me hacen una amniocentesis, y descubren que mi niño está mal, es que Dios quiere que ese niño venga así al mundo. Yo no lo dudaría. Lo tendría".
Católica conversa: "Cuando Letizia visitaba a su hermana Érika y comprobaba que llevaba una vida precaria le llenaba la nevera. Antes de su conversión radical al catolicismo Letizia era una agnóstica que solo profesaba adoración a la Virgen del Puño".
Monárquica: Así asistió el primo al funeral de Érika. La hermana pequeña de Letizia se suicidó a los 31 años y el exnovio y padre de la hija de la difunta le gritó al rey Juan Carlos en el tanatorio: "¡Tú tienes la culpa hijo de puta! ¡Vosotros la habéis matado!". A la salida Letizia hizo una reverencia a su suegro que el autor interpreta como una disculpa por lo que había pasado dentro: "Fue un gesto claro que demostraba a quién pertenecía ya mi prima. No se arrrodilló ante sus padres sino ante S.M. el Rey de España. Sentí asco". De la hija de Érika, Carla, el primo revela que Letizia quiso quitarle la custodia al padre biológico y no lo consiguió.
Culpable: Érika sufría depresión y no soportó la presión. El primo escribe "En presencia de Letizia no se puede hablar de Érika. Como si pudiera ofenderla o hacerle aflorar un sentimiento de culpa. Letizia tuvo que sentirse culpable de la muerte de su hermana. Yo la culpo, por omisión. Por no ser consciente de lo que ocurría en su entorno".
El libro tiene 300 páginas y tuvo 7 reediciones el mismo año de la publicación, 2013. Después nunca más se volvió a imprimir. Muchos de sus lectores se preguntaron por qué el primo decidió traicionar de esta manera la confianza de su prima, la reina. Lo explica al final. Considera que los Borbones son un tren expreso que arrasa una caravana de gitanos, los Ortiz Rocasolano. Y a una víctima vulnerable, su prima Érika. El libro tiene una dedicatoria corta "Para Érika" y al final revela que el libro es un acto de amor, o de venganza. El título es su último truco. Adiós Princesa no se refiere a la entonces Princesa de Asturias sino a su princesa: "Adiós Princesa. Adiós Érika"