En las últimas semanas, el Palacio de la Zarzuela ha estado en el centro de la polémica debido a las constantes quejas del personal de servicio por los hábitos de Victoria Federica, hija de la infanta Elena. A pesar de su edad y sus ingresos como influencer, la joven continúa compartiendo techo con su madre. Sin embargo, hay muchas noches en las que no pernocta en su domicilio. Zarzuela se ha vuelto en su bed & breakfast particular.
Aunque Victoria Federica tiene recursos para vivir de manera independiente, ha optado por quedarse en casa de su madre, donde no asume gastos ni responsabilidades domésticas. Según fuentes cercanas, la joven parece centrada en aumentar su cuenta corriente mientras disfruta de un estilo de vida lleno de viajes, cenas en exclusivos restaurantes y fiestas con sus amigos. Esta actitud, sin embargo, no pasa desapercibida en Zarzuela, donde pasa buena parte de su tiempo. Sobre todo por las noches.
Zarzuela se convierte en el hotel de los Urdangarin y los Marichalar
El Palacio de la Zarzuela, residencia oficial de la reina Sofía, ha sido descrito como un "hotel familiar" en el último año. La llegada de Irene Urdangarin, que se instaló con su abuela para tomarse un año sabático, marcó el inicio de una convivencia más compleja. Le siguió su hermano Miguel, que fue a Zarzuela a recuperarse de un accidente que sufrió mientras se preparaba para ser monitor de esquí. Juan, el hermano mayor, también pasó parte del verano allí. Y todo ello mientras Victoria Federica, que ya usaba Zarzuela en el pasado como dormitorio ocasional en sus noches de fiesta y fue vetada temporalmente por los reyes Felipe VI y Letizia, ha recuperado esta práctica, creando controversias dentro de los muros de palacio, tanto entre trabajadores como para los reyes.
La situación derivó en que los empleados de Zarzuela empezaron a elevar sus quejas a la dirección. Ya señalaron que la convivencia con los jóvenes miembros de la familia Urdangarin no era fácil, pues implicaba mayores demandas logísticas y operativas. Jardineros, personal de seguridad, cocineros y limpiadores han visto aumentar su carga de trabajo debido al uso intensivo de las instalaciones. Además, la actitud relajada de los jóvenes, incluyendo llegadas tardías y un ritmo de vida nocturno, no contribuye a mejorar el ambiente. Y la cosa empeoró con la presencia constante de Victoria Federica.
Victoria Federica genera incomodidad en palacio
Dos de los hijos de la infanta Cristina han seguido su propio camino: Juan volvió a Londres. Mientras que Irene se trasladó al Reino Unido para comenzar su vida universitaria. Pero Miguel sigue en Zarzuela. Y Victoria sigue usando palacio como dormitorio ocasional, generando molestias en el personal por sus malos hábitos: llega tarde con amigos, lo dejan todo perdido, hacen ruido...
A las quejas del personal se suma la incomodidad que genera su presencia para Letizia, quien preferiría mantener a los demás miembros de la familia a una mayor distancia de la monarquía. Aunque Zarzuela y la residencia oficial de la familia real están separadas por un kilómetro, la proximidad dentro del recinto puede derivar en encuentros no deseados. La reina Letizia ha dejado clara su preferencia por un entorno más controlado, lejos de posibles interferencias familiares.