Sharon Stone es un icono, pero no de la actuación, el glamur o la belleza, que también, sino de la autenticidad. Tiene uno de los coeficientes de inteligencia más potentes del gremio y se nota: lista, preparada, directa, sin complejos. Ha envejecido mejor que ninguna otra estrella de Hollywood de los 90. 30 años después de Instinto básico, Stone es de piedra. No se ha operado nada, se cuida la alimentación y la cara con cremas faciales y el resultado es de una madurez seductora. Este jueves ha aparecido a la alfombra roja de Los Ángeles en una gala de recaudar fondos para la lucha contra el cáncer y ha parecido otra persona: no es la hija de Sharon Stone. Es ella, la nueva Sharon Stone. No se estira la cara sino que le estiran pero sin bisturí. Con masajes:
Sharon Stone sigue siendo un mito. Desde que arrasó en las taquillas a la actriz rubia sigue presente en las revistas, en el cine y en la memoria de millones de cinéfilos. La película de Paul Verhoeven de la fasmoa escena de las piernas abiertas era mala a pedir de boca pero tuvo un gancho maravilloso en el personaje de Catherine Tremell, que seducía un soso Michael Douglas y era sospechosa de asesinar a sus amantes con un picadero de hielo. Al final no queda claro si era ella. El icono quedó allí, con el vestido blanco, sin bragas en la escena del interrogatorio policial para despistar y un cruce de piernas en que ya es Historia del cine.
La madura Stone hace menos pelis pero es admirada y mirada en Instagram. Tiene 3,6 millones de followers en aumento que desean ver fotos, noticias de la norteamericana, como aquel topless sin censura, con la bata cubriendo lo que la red prohíbe mostrar, los pezones, pero muy fotogénica, en el natural. Esta es la piscina de la gran Sharon Stone:
Stone escribe "Gratefully Imperfect on Perfect Day", agradecidamente imperfecta en un día perfecto. Luce su supuesta imperfección, sin photohops y con una imperfección perfecta. Y haciendo topless para sacarse manías. Una señora de 65 años que es más seductora que miles de instagramers retocadas, operadas o phtoshopeadas. Sharon brilla, dura como una stone. Una joya.
Sharon Stone es una de las actrices más inteligentes del panorama mundial. Algunos críticos la consideran one-woman-hit, la actriz con un solo hit. De aquel filme menor de los años 90 en el estrellado sin tener que ejercer a la vida real el papel turbio e inquietante. Habría sido vulgar, sin ropa interior, en otra actriz. Ella lo hace irresistible.
Sharon Stone, GTRES
En plena madurez protagonizó una portada de revista y pasó como en tantos otros casos recientes, Nicole Kidman sin ir más lejos: los portadistas juegan con el photo-shop y encontramos una Sharon irreconocible y sin arrugas. Así es ella y así la disfrazan en portada.
SHARON STONE SIN PHOTOSHOP:
Sharon Stone, GTRES
SHARON STONE AMB PHOTOSHOP:
Stone agradece la foto aunque no parezca ella: "Gracias por la bonita entrevista. El número 80 ya se puede comprar. Los editores tienen un cebo, los 30 años de la peli Instinto básico: "Para nuestra cuarta portada anual femenina, tenemos en la icónica, irrefrenable y formidable Sharon Stone. Esta primavera hace 30 años que Basic Instint cambió su vida. Nos lleva a aquellos días locos y explica cómo superó el sexismo y la adversidad para forjar una vida según sus propios términos". Un icono del feminismo que ha rechazado las operaciones de cirugía de otras estrellas de los 90 como Meg Ryan o Melanie Grifith. Stone es piedra. Ella es una joya, una piedra preciosa.