Una de las situaciones más desagradables que hay, lo saben los que lo han sufrido en algún momento u otro, es llegar a casa algún día, ver que la cerradura de la puerta la han forzado, o que directamente, la puerta está abierta, entrar acongojado en tu casa y ver que todo está revuelto, los cajones abiertos, todo esparcido de cualquier manera, y faltando un montón de cosas. En resumen, que es una experiencia francamente desagradable cuando te entran en casa a robar. Y eso es lo que le ha pasado ahora a una pareja de royals, ella, prima del rey Felipe. Hablamos de Sibilla Sandra Weiler y su marido, Guillermo de Luxemburgo.
Sibilla es prima segunda del rey Felipe, ya que su madre es la princesa Olimpia de Torlonia y Borbón, y su abuela es la infanta Beatriz de Borbón y Battenberg, hermana de Juan de Borbón. Él, Guillermo, es el hermano pequeño del Gran Duque Enrique de Luxemburgo, y ha trabajado en el Fondo Monetario Internacional de Washington, o en la Comisión de la Comunidad Europea en Bruselas. Casados desde 1994, primero en ceremonia civil y después por la iglesia, en la catedral de Versalles, la pareja ha tenido cuatro hijos: Pablo Luis, los gemelos Leopoldo Guillermo y Carlota Guillermina de la Gloria y Juan Andrés, y a menudo han tenido relación con sus primos Borbones españoles, especialmente con la infanta Cristina.
Ahora, la pareja de aristócratas ha tenido un susto mayúsculo, ya que han sido víctimas de un robo en su casa. Un grupo de ladrones acaba de perpetrar un golpe que por suerte, no ha tenido que lamentar daños personales. Los manguis entraron en su residencia el pasado 8 de marzo, pero no se ha sabido hasta ahora en un comunicado. Por lo visto, unos desconocidos rompieron una de las ventanas de su casa para poder acceder a la vivienda. Una vez dentro, aunque no se especifica un listado de los objetos robados, sí que se ha podido saber que los atracadores se hicieron con un botín "de lo más interesante, formado por obras de arte y joyas pertenecientes a la familia real", dice un comunicado de la oficina de prensa de la policía local, tal como recoge la revista ¡Hola!. También se especifica que "después de registrar la casa, los ladrones huyeron, por lo que se intuye que tan solo hubo pérdidas materiales y no hubo que lamentar daños personales".
La investigación para tratar de saber más detalles de lo que ha pasado sigue su curso. La casa donde viven Sibilla y Guillermo es una mansión unifamiliar de tres pisos. De momento, ni el matrimonio afectado ni la gran familia ducal de Luxemburgo se han pronunciado al respecto sobre cómo se encuentran, sobre si había alguien en la casa en el momento del robo y sobre qué les han robado los ladrones, ni tampoco si entre estos objetos había alguno de especial valor económico o simbólico.