Sofía es el gran misterio que queda dentro de la Familia Real. La gran desconocida. Felipe es el superado, Letizia la trepadora infiel, la emérita se lo tragaría todo para mantener el estatus y Leonor es sobria, fría y resignada. En cambio, de la infanta Sofía, no sabemos prácticamente nada. Este lunes 29 de abril la más pequeña del clan cumple 17 años, una edad simbólica: ya no es una niña, no acepta ser solo una adolescente e inicia la cuenta atrás para ser una adulta. Lo hace en el mejor momento: emancipada de Palacio, a punto de acabar el primer año de Bachillerato en Gales y presidir su primer acto oficial, unos premios de Fotografía. Por primera vez es la suplente. Si Juan Carlos moría no tenía hermano pequeño. Si Felipe muere no tiene hermano pequeño. Si Leonor muere, se incapacita o abdica tiene hermana pequeña, reinará Sofía. Su papel es muy complicado, no puede ser libre como lo son las infantas Elena y Cristina, nunca llamadas a reinar, pero tiene que permanecer en tensión por si le toca el turno. Leonor tiene que brillar y Sofía tiene que aceptar el papel de segunda, un rol ingrato como revela Harry de Inglaterra, la prueba que ser "el suplente" puede conducir a la frustración y la renuncia.
Zarzuela está cometiendo un error con Sofía que puede pagar caro: ponerla siempre a la sombra de Leonor y al mismo tiempo hacerla una Leonor bis. Es decir, Sofía solo tiene un año menos que la princesa pero ni es princesa, ni preside actos, ni recibe el mismo trato y cuando destaca por alguna cosa, como su altura, le rebajan el tamaño de los zapatos para no dejar Leonor como una mujer baja. Eso podría soportarse si la dejaran seguir su camino, pero resulta que Sofía es Leonor 2, una copia de la hermana: estudiaba en el mismo colegio religioso y de élite que Leonor, la hacen estudiar en Gales en el mismo internado que Leonor y algunas voces ya advierten que tendrá que pasar los mismos tres años de Ejército que Leonor. La decisión todavía no se ha hecho pública pero la atendrán que convencer para obligarla a ingresar en el Ejército tres años de su vida solo para contentar a los militares para el caso remoto que Sofía acabe de jefa de las Fuerzas Armadas. Sofía sufre toda la parte mala de ser princesa sin ser la princesa. Un horror. Ahora aprovecha los 2 años en Gales para definir su personalidad.
Aquellas fotos en Gales de agosto, con camisa de cuadros abierta y holgada, top negro, ombligo al aire y pantalones, sin las faldas que le hacen llevar los de Palacio, permitían avistar una chica con un espíritu más abierto, desinhibido y libre. Sobre su vida sentimental no se sabe ni siquiera si le gustan los chicos o las chicas. A los 17 años ella ya lo sabe, pero la prudencia aconseja que todavía no se haga pública ninguna de sus relaciones, como con su hermana de 18 años. El tiempo dirá. Lo único que tiene seguro es una altura y un físico mucho más contundentes que Leonor, que le envidia la altura.
Leonor a los 18 años hace 1,63 metros y Sofía a los 17 años "supera el 1,70", literalmente. No quieren mojarse y decir que hace 1,72 ó 1,73 pero Sofía es realmente alta, mucho más que su madre y que la heredera. De Letizia afirman que hace de altura 1,68. Queda claro que Sofía es más borbón, ha salido al padre. El rey Felipe hace 1,97 metros. La clave es que la princesa es diez centímetros más bajita que la infanta. Sofía mira a Leonor por encima del hombro. No hay mala relación entre hermanas a pesar del ingrato papel que le hacen jugar a Sofía. Cuando vuelva de Gales será adulta y otra persona. Que la cuiden no sea que renuncie a los derechos dinásticos y entonces el suplente de Leonor será un tal Froilán. Que Dops nos coja confesados.